5 prácticas sexuales realmente extrañas
Estas son algunas de las prácticas sexuales más extrañas. ¿Las conocías?
Hemos visto fetichismos extraños, como los que tienen los 'Woolies', esa gente que se excita con la lana; y también hemos encontrado algunos juguetes sexuales muy bizarros alrededor del mundo. Sin embargo, nada nos sorprende más que estas prácticas sexuales poco conocidas y muy, muy extrañas. ¿Has practicado alguna?
Altocalcifilia: la gente que tiene este fetichismo lleva el gusto por los zapatos al extremo. Se trata de gente que se excita y obtiene placer al observar o llevar zapatos de tacón alto. Está asociada al retifismo, que es una atracción fetichismo por los zapatos en general.
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Parcialismo: estas personas centran sus relaciones sexuales en una parte del cuerpo en concreto, con la cual suelen obtener más placer sexual que con los genitales. Suele ser común en el parcialismo el fetichismo por partes como los pies (también llamado podofilia), las axilas, la nariz o el cabello. La excitación de estas personas viene al lamer, chupar, besar, tocar, acariciar u oler esa parte del cuerpo que tanto le excita.
Acrotomofilia: los acrotomofílicos sienten una gran atracción por personas con algún miembro amputado donde, en lugar de una extremidad, tienen un muñón. Suele ocurrir especialmente con personas que tienen amputada alguna de las piernas. El deseo sexual en este caso está asociado a estas partes del cuerpo y estas personas pueden llevar tan lejos su obsesión que acaben amputándose alguno de sus miembros.
Sadismo y masoquismo: esta parafilia se ha vuelto conocida ultimamente tras el éxito de '50 Sombras de Grey'. Las personas que practican en sadismo y el masoquismo relacionan el placer sexual con el dolor y el sufrimiento, por lo que sus prácticas sexuales suelen incluir golpes, latigazos o la asfixia. Es importante tener precaución en este tipo de práctica sexual, ya que puede volverse peligrosa.
Somnofilia: estas personas obtienen excitación sexual al mantener relaciones con desconocidos que están dormidos. Hay diferentes rangos, por lo que puede quedarse tan solo en masturbación o llegar a producirse el acto sexual con la persona que duerme. El miedo a que la persona se despierte les aumenta la excitación.
¿Conocías estas prácticas sexuales extrañas?
