5 usos del aceite de argán para el rostro que no conocías

Todo lo que puedes conseguir si empiezas a utilizar el aceite de argán para el rostro.

Gracias a su vitamina E y sus antioxidantes, este aceite original de Marruecos se ha convertido en uno de los productos de belleza estrella en los últimos años. Sus propiedades son tantas que podemos utilizarlo de diferentes formas y para distintos fines, desde nutrir el cabello hasta mejorar el aspecto y la salud de nuestra piel.

En este artículo nos centraremos en los diferentes usos del aceite de argán para el rostro y cómo puede hacer que nuestra piel esté más joven, más hidratada y más luminosa, evitando la aparición de arrugas y líneas de expresión.

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Si aún no has probado este producto, hazte enseguida con un bote de aceite de argán y toma nota de cuáles son sus propiedades y cómo debes utilizarlo para sacarle el mayor partido posible.

¿Cuáles son las propiedades del aceite de argán?

Aporta vitamina E. Como ya hemos dicho, este aceite contiene mucha vitamina E, además de minerales y componentes antioxidantes que conseguirán cuidar tu piel desde dentro. Esto hará que luzca mucho más sana y radiante por fuera.

Hidrata. Gracias a los ácidos grasos que contiene, el aceite de argán es el hidratante perfecto para una piel con tendencia a secarse. Además de hidratar por fuera, este aceite hace que la piel retenga su propia agua para conservar la hidratación por más tiempo y conserve su estructura.

Previene el envejecimiento. Gracias a los antioxidantes que contiene y a la vitamina C, este aceite funciona como un producto antiedad, neutralizando la acción de los radicales libres y previniendo la aparición de arrugas. Además, aporta al cutis una mayor elasticidad, lo que hace que nuestro rostro conserve un aspecto más joven y luminoso.

Aporta suavidad. Además de todas los beneficios que aporta con respecto a la salud de la piel, una de sus mejores ventajas es que aporta suavidad de forma instantánea a la piel, dejándonos una piel sedosa después de su aplicación.

Elimina las marcas de acné. El aceite de argán ayuda a aliviar la inflamación y la irritación producida por el acné en el rostro, pero sobre todo, ayuda a eliminar las marcas de acné unificando la piel. Además, una de las ventajas de este aceite es que puede aplicarse en todo tipo de pieles ya que se absorbe con facilidad, por lo que puedes utilizarlo aunque tu piel sea grasa con tendencia a tener granitos.

¿Cómo podemos utilizar el aceite de argán para el rostro?

Mascarilla antiarrugas. Ya que resulta muy eficaz para prevenir la aparición de arrugas, podemos preparar una mascarilla antiarrugas con el aceite de argán y otros productos que conseguirán dar a tu piel un aspecto más terso y joven. Solo necesitas dos cucharadas de aceite de argán, dos cucharadas de aceite de almendras y una cucharada de glicerina líquida. Calienta los tres ingredientes al baño maría hasta que se mezclen y luego deja que se enfríe. Aplica la mezcla en tu rostro a modo de mascarilla y déjalo actuar durante 20 minutos.

Mascarilla nutritiva. Si tu piel es seca y con rojeces y quieres hidratarla y nutrirla para que esté más suave y luminosa, puedes preparar una mascarilla nutritiva mezclando diez gotas de aceite de argán con dos cucharadas de yogur natural sin azúcar y una cucharada de miel. Mezcla todo en un recipiente hasta obtener una mezcla homogénea y aplícalo sobre tu rostro con una brocha. Espera 20 minutos antes de retirarla con agua.

Mascarilla antiacné. El aceite de argán evita que los poros se obstruyan y aparezcan granitos, además de aliviar la inflamación del acné y regenerar los tejidos. Por eso es el ingrediente perfecto para preparar una mascarilla antiacné. Mezcla diez gotas de aceite de argán con dos cucharadas de cúrcuma y aplícalo en tu rostro utilizando una brocha. Después espera unos 15 minutos para que haga efecto y lava tu cara con agua. Aplica esta mascarilla dos o tres veces por semana para tratar tu acné y conseguir un rostro más limpio y suave.

Tónico facial. Limpia tu rostro con este tónico facial casero con aceite de argán para eliminar cualquier resto de suciedad y tener una piel limpia y con más luz. Mezcla dos cucharadas de agua de rosas con cinco gotas de aceite de argán e impregna un trozo de algodón con la mezcla para limpiar tu rostro. Tu rostro debe estar ya desmaquillado y limpio cuando lo apliques. Este tónico facial le devolverá la luminosidad a tu cara.

Aplicación directa. También puedes beneficiarte de las propiedades de este aceite aplicándolo directamente sobre tu rostro masajeando con las yemas de los dedos. No necesitarás añadir ningún otro producto si lo que quieres es hidratar tu piel y nutrirla con todas las vitaminas del aceite de argán. Con solo unas cinco gotitas sobre tu piel cada noche, notarás los resultados en pocos días.

Utilizar el aceite de argán para el rostro le dará a tu piel el aspecto que siempre has querido: joven, terso y luminoso.