9 años después de la boda, un regalo sin abrir les dio la clave del matrimonio
Esta pareja encontró un regalo sin abrir 9 años después de su boda, y contenía la clave del matrimonio.
Una boda es uno de los días más importante de tu vida. Aunque se viven muchas emociones y experiencias junto a tus seres queridos y a tu pareja en ese día, no se puede negar que los regalos también son una buena parte de ella. Algunos regalos son más especiales, otros más útiles, otros son más simbólicos... sea como sean, cualquier pareja está encantada de recibirlos.
De entre todos los regalos que Brandon y Kathy recibieron en día de su boda, hace ya nueve años, hubo uno más especial, y también muy original. Se trataba de un sobre que les había entregado la tía Alison en el que de ponía No abrir hasta la primera discusión. El matrimonio se había tomado tan en serio la indicación de esperar, que se habían acaba olvidando de él.
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Los primeros años pensaron que el sobre contendría una especie de llave mágica para acabar con cualquier problema de pareja y, aunque discutieron a veces, trataron de solucionarlo por ellos mismos y guardar el sobre para una discusión que de verdad lo mereciera. Lo siguientes años, simplemente se olvidaron de él.
“Una tarde, bebiendo una copa de vino, Brandon y yo hablábamos acerca de una boda a la cual fuimos invitados pensando qué regalarles a los novios. Empezamos a recordar qué nos regalaron hace nueve años en nuestra boda y qué fue lo que nos gustó más. Ahí fue cuando nos dimos cuenta de que era el regalo que aún seguía empacado.”, explica Kathy. Así que decidieron abrir el sobre, aunque no estuvieran cumpliendo la indicación de tía Alison, ya que no habían tenido ninguna discusión.
Cuando lo abrieron, encontraron algo de dinero y dos sobres, uno para cada uno de ellos. En el de ella, decía: “Kathy, compra pizza, camarones o lo que a ambos les guste. Con amor, tía Alison. Prepara la bañera”. En el de su marido, “Brandon, compra flores y una botella de vino. Con amor, tía Alison”.
Aunque no era lo que esperaban, sí que les ayudó en cierta forma a ver de otra manera el matrimonio. “Todo ese tiempo estuvimos aprendiendo a tener paciencia, a entendernos, a ser un equipo, socios y amigos. Entendimos que no existe ninguna herramienta que pueda conservar el amor. La llave de un matrimonio feliz no estaba en el sobre, sino en nosotros mismos", cuenta Kathy.
Sin duda, ¡tía Alison acertó con su regalo!
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