Catherine O'Hara llevó un "autobús lleno de pelucas rojas" para "Beetlejuice Beetlejuice"

En The Scenario, la reportera Kirbie Johnson lleva a los lectores tras las bambalinas de las películas y series de televisión más de moda para revelar cómo se crean las mejores pelucas, el maquillaje de efectos especiales y mucho más. Para esta edición, Johnson ha hablado con la diseñadora de peluquería y maquillaje Christine Blundell, que comparte con nosotros los guiños deliberados de Beetlejuice a la película original y la experiencia de trabajar con el cineasta Tim Burton para llevar a cabo su visión.

Han pasado 36 años desde que vimos por primera vez al encantador y grotesco bio-exorcista en la gran pantalla, y la secuela Beetlejuice de Tim Burton es tan divertida como la original. Los fans de la película de 1988 ya habrán notado los ingeniosos homenajes a su predecesora: desde servir gambas en un velatorio hasta la insólita aparición de Adam y Barbara Maitland. Por supuesto, también hay muchos guiños al original en cuanto a peinados y maquillaje. Advertencia: Deja de leer ahora si no quieres ser tan mimado como los comestibles de los Deetz.

Winona Ryder sólo tenía 16 años cuando apareció en Beetlejuice y tiene 52 en la secuela, pero su pelo sigue siendo inquietantemente similar, sobre todo cuando presenta su programa de televisión de terror, Ghost House With Lydia Deetz. "Quería que pareciera atrapada en el tiempo con el look de la película original para su programa de televisión", explica a Allure la diseñadora de peluquería y maquillaje Christine Blundell. El peinado de Lydia no sólo rinde homenaje a su aspecto original para complacer a los fans de la película, sino que también le ayuda a interpretar su personaje de vidente de fantasmas en el programa de televisión. Después de la escena en la que Lydia graba su programa, su flequillo empieza a ser más suave y menos puntiagudo a medida que avanza la película, pero no demasiado suave. "Tenía que seguir estando loca", dice Blundell.

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Su famoso peinado se creó con una combinación de flequillo falso que se conectaba a un postizo, culminando en lo que Blundell describe como un "tercio" de peluca que se funde con el pelo real de Ryder.

En cuanto a la excéntrica Delia Deetz, interpretada por la acaparadora de escenas Catherine O'Hara, su pelo pasa del rojo cobrizo original a lo que Blundell llama un rojo "titiano". Si el flequillo de Lydia pretendía dar a entender que sigue estando "loca", el pelo de Delia es la representación de una mujer cada vez más desquiciada. "Le hice media docena de pelucas con mi peluquero en un tono cobrizo que se parece más a [su pelo en] la primera película y luego traje un montón de pelucas baratas en diferentes tonos de rojo y las puse a todas en maniquíes", dice Blundell. "Cuando [O'Hara] llegó, teníamos un autobús lleno de pelucas rojas. Probamos unas cuantas y ella dijo: 'Creo que se ha vuelto cada vez más loca y más artística'". Debido a esta dirección, Blundell profundizó en el color. Al final, O'Hara lleva seis pelucas de color rojo titiana cortadas y coloreadas a medida.

Dado que esta secuela tiene lugar tres décadas después de la primera, los actores no necesitaban parecerse a sus yos más jóvenes para mantener la continuidad, excepto Michael Keaton. Dado que Beetlejuice vive en el más allá y, por tanto, no envejece, era importante mantener su aspecto casi idéntico al del original.

Michael Keaton luce dientes postizos y una prótesis de nariz "rota" en la película -igual que en la primera-, pero para la secuela tiene un aspecto un poco más "muerto". "Ya sabes, estaba muerto, así que nada tiene que cambiar", dice Blundell. Sin embargo, Blundell dice que Burton quería evitar hacer "montones de CGI", por lo que en su lugar optaron por hacer que Keaton tuviera un aspecto un poco más desagradable para cubrir cualquier signo visible de envejecimiento en la medida de lo posible. "Hice algunos retoques con el maquillaje de Beetlejuice para darle un poco más de grima: todo era un poco más asqueroso y descompuesto".

El pelo de Beetlejuice ha sufrido algunos retoques menores, pero su maquillaje sigue siendo el mismo: los tonos morados y negros alrededor de los ojos son los mismos, y su piel sigue siendo de un pálido blanco amarillento. Su pelo tiene más musgo y es una "fracción" más largo. "A Michael le gusta [su pelo] de pie", dice Blundell. "Lo retocó y afinó con nosotros; también estuvo muy involucrado en el look original, así que fue muy específico con lo que estaba haciendo".

En esta película, conocemos parte de la historia de Beetlejuice, incluida la de su ex mujer asesina, Delores (Monica Belluci), que le envenenó hace siglos para conseguir la vida eterna chupándole el alma. Naturalmente, Beetlejuice la hizo pedazos. En el presente, la vemos volver a la vida, recomponerse y vengarse de su ex marido.

Puede que el personaje le recuerde a la Novia Cadáver, pero Blundell dice que esa no fue la inspiración. "Era más bien la Novia de Frankenstein", dice Blundell. A pesar de su maquillaje intencionadamente desordenado, Delores aparece muy glamurosa en la película, lo que Blundell atribuye a que Belluci es Belluci. "Le maquillamos la cara, le [untamos] el pintalabios, [untamos] la sombra de ojos, y pones una cámara delante de ella, y dices: 'Oh, mierda, ¡se ha puesto más guapa! Le robó el corazón a Beetlejuice", dice. "Sólo porque esté muerta y sea una chupadora de almas no significa que no pueda ser una hermosa chupadora de almas". Blundell dice que intentaron ponerle una peluca rizada pero decidieron que "ya se había hecho antes", así que optaron por la peluca larga emparejada con maquillaje "goteando" por su cara.

Por supuesto, hay muchos efectos especiales de maquillaje característicos de Burton en esta película, desde los encogedores (¡justicia para Bob!) hasta el padre de Astrid, que se ahogó, y el marido de Delia, que fue devorado por un tiburón tras un accidente de avión, pero dejaremos esos detalles para más adelante.