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Cómo cuidar el cuero cabelludo tras la caída del cabello

Cómo cuidar el cuero cabelludo tras la caída del cabello

Los dos tipos más comunes de alopecia son la androgenética y el efluvio telógeno. La alopecia androgenética es "un tipo de pérdida de pelo que se manifiesta como un adelgazamiento del cabello y tiene un inicio gradual", explica Gary Goldenberg, dermatólogo certificado y fundador de Goldenberg Dermatology en Nueva York. "Es de naturaleza genética y suele heredarse de cualquiera de los padres".

El segundo tipo más común de caída del cabello, el efluvio telógeno, suele estar causado por el estrés físico o emocional del cuerpo, como el embarazo, la cirugía, una nueva medicación, el estrés y otros factores. Con el efluvio telógeno, "el pelo se cae en mechones, normalmente entre seis y doce meses después del acontecimiento estresante", explica Goldenberg. La caída del cabello no sólo hace que parezca más fino y menos denso, sino que también deja al descubierto más piel del cuero cabelludo y debe tratarse con cuidado.

Abordar la alopecia con suavidad

Si actualmente te enfrentas a la caída del cabello, es importante que trates la piel afectada por la alopecia con suavidad para no agravar más el problema. Cualquier tratamiento de decoloración, coloración o alisado del cabello puede favorecer la caída excesiva o la rotura, lo que provocaría una mayor caída del cabello y un cuero cabelludo dañado. "El acto de tirar del pelo con demasiada fuerza puede provocar la caída del cabello, por lo que hay que evitar recogerse el pelo en una coleta y todos los accesorios para el cabello", explica Sapna Palep, dermatóloga certificada especializada en la caída del cabello y fundadora de Spring Street Dermatology en Nueva York.

Si tienes que recogerte el pelo, utiliza un accesorio que no te lo apriete demasiado, como los Kitsch Satin Sleep Scrunchies o los Goody Ouchless Ribbed Hair Scrunchies. Además, "el calor excesivo en forma de secadores, rizadores y planchas puede causar daños estructurales en los folículos y dañar aún más el cabello", explica Lavanya Krishnan, dermatóloga certificada y directora médica de Arya Derm en San Francisco.

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Una ducha agresivamente caliente podría dañar aún más la piel con alopecia, también. "Las temperaturas excesivamente calientes pueden deshidratar la piel del cuero cabelludo que rodea los folículos pilosos y conducir a la fragilidad del folículo piloso", dice Krishnan. "También puede deshidratar los folículos pilosos reales y causar un cabello dañado".

Hidratar el cuero cabelludo, no sólo el cabello

Dado que la caída del cabello puede hacer que el cuero cabelludo sea más susceptible a la sequedad, es importante mantenerlo hidratado cuando se padece alopecia. "Las cremas hidratantes habituales no están diseñadas para aplicarse en el cuero cabelludo, y los ingredientes hidratantes típicos, como la glicerina, son muy solubles en agua y se eliminan fácilmente con los champús o acondicionadores", explica Kelly Dobos, química cosmética.

Ingredientes como el cloruro de hidroxipropil bis-hidroxietil-dimonio, un humectante, se adhieren mejor al cabello y al cuero cabelludo, proporcionando una hidratación más duradera incluso en las aplicaciones con aclarado.

Lo mejor es buscar champús que contengan tensioactivos suaves que limpien con suavidad, como los isetionatos, las betaínas y el hidroxipropilsulfonato de sodio. Dobos recomienda probar el champú Pura D'or Hair Thinning Therapy para pieles con alopecia: su fórmula contiene humectantes y tensioactivos suaves, como el cloruro de hidroxipropil bis-hidroxietil-dimonio, para mantener el cuero cabelludo hidratado.

Mientras tratas tu cuero cabelludo con ingredientes hidratantes, mantente alejado de otros que sólo exacerbarán el problema. Palep recomienda evitar ciertos ingredientes en cualquier producto que pueda entrar en contacto con el cuero cabelludo: "Los ingredientes problemáticos pueden ser el alcohol, el formaldehído, las fragancias sintéticas y el lauril sulfato de sodio", dice Palep.

No olvides la protección

Además, el adelgazamiento del cabello puede hacer que el cuero cabelludo sea más vulnerable a los rayos UV: "Hay que aplicar la protección solar en el cuero cabelludo donde el cabello es más fino, donde se ve claramente la piel", explica Palep. El mayor problema en este caso es el tipo de protector solar que utilices para proteger el cuero cabelludo: las lociones solares minerales y las cremas que contienen óxido de zinc o dióxido de titanio serían demasiado difíciles de distribuir uniformemente alrededor del cabello y corren el riesgo de dejar un tinte blanco que será más visible en el pelo más oscuro.

En su lugar, Palep recomienda optar por una bruma protectora y ligera que proporcione una cobertura total, ya que se pulveriza fácilmente y suele ser resistente al agua. Algunos de sus favoritos son Neutrogena Ultra Sheer Body Mist Sunscreen SPF 100+ y Sun Bum Protecting Scalp & Hair Mist SPF 30 Sunscreen Spray.

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Busca productos no irritantes que no agraven más tu cuero cabelludo, pero lo más importante es que intentes ser amable contigo mismo. Experimentar cualquier tipo de pérdida de cabello, ya sea inducida por el estrés o genética, puede ser angustiante, pero es importante recordar que otros están pasando por la misma situación.

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