Cómo recargar las pilas después de un viaje
Ahhh, hogar dulce hogar. No hay nada como llegar de vuelta después de unas vacaciones tan necesarias. Las maletas están llenas de recuerdos, el rollo de la cámara está repleto de los increíbles recuerdos que has hecho y las cosas no podrían estar mejor...
...hasta que te acuerdas de todo lo que tienes que hacer. Desempaquetar tus cosas, volver a la rutina de casa, intentar volver a tu horario de sueño anterior a las vacaciones... Aceptémoslo, todo puede ser un poco abrumador. Por suerte, estamos aquí para ayudarte. Sigue leyendo para conocer cinco sugerencias probadas y verdaderas sobre cómo recargarte después de un viaje.
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Desembalar lo antes posible
Créenos, sabemos lo molesto que es tener que desempacar una vez que llegas a casa. Por eso es mucho mejor que te pongas a hacer las maletas lo antes posible: pon tu lista de reproducción o tu podcast favorito y tómate un tiempo para deshacer las maletas (y asegurarte de que todo está en su sitio). No te olvides de ponerte a lavar la ropa, ya que es fundamental hacerlo todo. Además, podrás volver a usar tus prendas favoritas mucho antes.
Muévete
Hacer ejercicio es probablemente lo último en lo que querrás pensar después de tu viaje, pero podría ser el refresco que necesitas. Por supuesto, no querrás hacer nada súper intenso, pero un mini entrenamiento es la manera perfecta de mantenerte con energía. Actividades como el yoga o los estiramientos te ayudarán a moverte, a dormir mejor por la noche y a liberar cualquier estrés y tensión después de pasar horas en el coche o en el avión. Incluso puedes terminar tu entrenamiento con una meditación relajante para mantener las vibraciones frías.
Coger un poco de Zzz's
Tanto si te has ido de viaje por carretera a través del país, como si has hecho una escapada internacional o una aventura en algún lugar cercano a casa, necesitarás renovar tu horario de sueño. Si llegas a casa durante el día en lugar de por la noche, trata de evitar la siesta y espera hasta más tarde para empezar a relajarte. Y aunque sea difícil evitar ver las redes sociales o poner tu película favorita justo antes de irte a la cama, también puede ser una buena idea evitar los aparatos electrónicos durante ese tiempo. Sus pantallas brillantes emiten una luz artificial que engaña a tu cuerpo y te impide conciliar el sueño más fácilmente. Tu nuevo y mejorado horario de sueño merecerá la pena por la reducción del tiempo de pantalla.
Asegúrese de estar al tanto
Irse de vacaciones te da la oportunidad de escapar de tu vida cotidiana. Desde las tareas que puedas tener hasta tu trabajo en la heladería, las vacaciones permiten que todas tus responsabilidades habituales pasen a un segundo plano mientras estás fuera. Cuando vuelvas a casa, es normal que todo te parezca demasiado. Asegúrate de ponerte al día y ver lo que te has perdido mientras estabas fuera de la ciudad. Pronto te parecerá que nunca te has ido.
Tómese un tiempo para descomprimirse
Viajar puede ser realmente agotador. Es muy importante volver a la rutina diaria y organizarse, pero también es importante tomarse tiempo para relajarse y descansar. Para ello, hay que dedicar un tiempo al cuidado personal: tal vez quieras convertir tu baño en un paraíso de mimos con una ducha de día de spa. Tal vez te apetezca más acurrucarte con tu última lectura, o prefieras poner el último episodio de esa serie que te perdiste mientras estabas fuera. Al fin y al cabo, parte de la "vuelta a la normalidad" consiste en tomarse un tiempo para uno mismo.