Consigue una piel perfecta
REGLAS FÁCILES PARA CUIDAR TU PIEL
Seguimos intentando ser perfectas, es algo inherente en las mujeres y a veces un defecto insoportable… Nos preocupamos de comprar productos carísimos y tratamientos de belleza y spa de ensueño pero a veces, la gloria está mucho más cerca de lo que parece.
Nuestra piel está continuamente expuesta a las inclemencias del tiempo, la contaminación y mil agentes y bacterias que la dañan. Un cuidado básico y a poder ser diario es esencial para que luego, todos esos milagrosos productos funcionen.
Te damos unas reglas básicas para cuidar y tratar tu piel, a veces conseguir la piel perfecta no tiene que ser un imposible:
Regla uno: la alimentación. Es un tópico pero es esencial, si evitas las comidas preparadas y el fast food mantendrás los niveles de azúcar en tu sangre equilibrados. Es esencial para que tu piel mantenga su luminosidad, además, debes beber mucha agua y decantarte por los snacks sanos como las zanahorias.
Regla dos: No uses exfoliante en tu rostro cuando tengas granitos. La fricción de los productos exfoliantes puede causar irritación y como resultado regalarte rojeces innecesarias. Si es tu caos mejor utiliza las palmas de tus manos para extender en gel limpiador con foam, es más inofensivo y consigues el mismo efecto purificador y limpiador sobre tu rostro. Puedes aplicar, después, una loción tonificante con un algodón.
Regla tres: Si tienes la piel grasa utiliza gel hidratante en lugar de crema. El resultado será el mismo, tu piel estará hidratada pero evitarás ese efecto aceitoso tan odioso. Si realmente tu zona T es muy grasa decántate mejor por un gel de aloe-vera, contiene minerales naturales, calma, cura y no engrasa. Más natural imposible.
Regla cuatro: dos o tres veces por semana aplícate una mascarilla que contenga caolín. Déjala durante unos 20 minutos y conseguirás reducir la inflamación de la piel y la calmará.
Regla cinco: Con el maquillaje quieres algo que reconforte tu piel y que a la vez esconda cualquier imperfección. Prueba los polvos minerales que te aporta cobertura pero siempre con un efecto delicado.
Trucos caseros: Para relajar la piel y cualquier irritación, en un bol con agua caliente, añade una cucharita de aceite de eucalipto, y aplícate con un pañuelo durante unos minutos. Y para las manchas de tu cuerpo disuelve una taza de sal en agua tibia y con una toalla húmeda aplícatela sobre la zona afectada unos 10 minutos.