Cuida tu piel del estrés facial
Llega el invierno y es uno de los momentos más importantes para mantener al día el cuidado de nuestra piel. Pero no por ello debemos olvidarnos que la piel debe cuidarse durante todo el año. Cuando hablamos sobre el cuidado de la piel, los tratamientos de belleza y la cosmética encontramos cientos de posibilidades en el mercado. Pero los avances y las investigaciones en lo referente a la salud de la piel, hace surgir con fuerza un nuevo término entre los consumidores: la neurocosmética.
¿Qué es la neurocosmética?
Lo siento, pero tu aceite facial no está hidratando tu piel Reafirma tu piel con ejercicios de yoga facial
Este concepto se refiere a la conexión entre la piel y el sistema nervioso, es decir, el cerebro. Esta técnica cosmética busca tratar las malas consecuencias para la piel que el cerebro puede crear. Estas son principalmente el estrés o la ansiedad por ejemplo. Pero también juegan un papel fundamental los hábitos poco saludables, muy comunes en los actuales ritmos de vida frenéticos de la sociedad.
Es por tanto que la neurocosmética no solo cuida tu piel, sino que además mejora la calidad de vida de las personas que hacen uso de ello. La forma más sencilla para poder cuidarnos e introducir la neurocosmética en nuestras vidas es adquiriendo un buen hábito como es la rutina facial entre los que debemos introducir los mejores boosters para la piel.
Una buena rutina facial previene el envejecimiento
La rutina facial consiste en realizar una serie de tratamientos personales diarios en la piel del rostro para cuidar, proteger y prevenir posibles efectos adversos como los resultantes del estrés facial. Los más comunes son la sequedad, flacidez y envejecimiento temprano de la piel. Son múltiples los factores que influyen en el estrés facial, pero el más común actualmente como hemos comentado es el estrés y la polución presente en el aire de las grandes ciudades.
Para ello desde la neurocosmética nos proporcionan productos que usados en nuestra rutina nos benefician con resultados desde el primer día. Para realizar una completa rutina facial consta de diferentes pasos:
- Una buena limpieza facial: eliminar las impurezas o restos de maquillaje es importante antes de aplicarnos cualquier otro producto, pero sobre todo es importante para la salud de la piel.
- Exfoliación: este paso no hay que realizarlo a diario y no debemos olvidar que hay gran diferencia entre exfoliantes químicos y los mecánicos.
- Tónico: este paso cierra los poros y equilibra el ph de la piel, preparándose para los últimos pasos de nuestra rutina.
- Sérum: estos productos son concentrados de principios activos que penetran en la piel como los serum boosters. Las ventajas de los boosters son la gran adaptabilidad que tienen a todo tipo de pieles y su gran facilidad de uso en la rutina diaria. Además están principalmente desarrollados para combatir el estrés facial.
- Crema: hay numerosos tipos de crema, entre las que nos encontramos cremas hidratantes, antimanchas, reafirmantes… Pero la mejor opción para combatir una de las consecuencias del estrés como es el envejecimiento prematuro de la piel, es una crema facial antiedad.
- Protección solar: no debemos olvidar que el sol es el principal factor que daña la piel durante todo el año. Por ello siempre que salgamos a la calle debemos aplicarnos una capa de protección solar, sea la estación del año que sea ¡incluso en los días nublados!.
Siguiendo los pasos de la rutina facial, adquiriendo hábitos más saludables y trabajando en el cuidado de nuestra piel con los mejores productos, mantendremos nuestro rostro joven y saludable.