Curas naturales para el jet lag

El jet lag se produce porque viajar suele alterar nuestro ritmo circadiano, que es el reloj biológico que ayuda a controlar cuándo nos despertamos y nos dormimos. Cuando estamos en el aire y cruzamos diferentes zonas horarias, se altera nuestro ritmo natural y obligamos a nuestro cuerpo a hacer un trabajo extra para ponerse al día. Una cosa que la gente suele hacer en este caso es llenar sus cuerpos de cafeína para tener el "combustible" para seguir adelante, pero esto en realidad está haciendo más difícil para su cuerpo y confundiendo su ritmo circadiano aún más. Te recomiendo que te decantes por el té descafeinado, que no sólo te ayudará a calmar tu cuerpo, sino que también garantizará que te mantengas hidratado. Una vez que hayas aterrizado, calcula la diferencia horaria y toma café sólo cuando lo hagas normalmente en casa. Esto te ayudará a mantener el equilibrio.

Los adaptógenos son hierbas que se han utilizado en la antigua medicina china para ayudar a estabilizar el sistema nervioso. Se sabe que ayudan a aliviar el estrés, y algunos adaptógenos, como la ashwagandha, también ayudan a conciliar el sueño.

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Recomiendo llevar un paquete o dos de Moon Juice Dream Dust Sachets para el vuelo y durante el viaje. Los ingredientes son tan limpios y promueven un sueño profundo y reparador. La ashwagandha también es uno de los ingredientes principales de las gominolas Lemme Chill.

Una nota importante: informe a su médico antes de tomar adaptógenos. Son bastante potentes, por lo que es bueno que se lo comuniques a tu médico por si interactuaran con cualquier otra cosa que estés tomando (especialmente en el caso de personas con irregularidades endocrinas u hormonales).

Estos comprimidos masticables cambian las reglas del juego cuando se trata de aliviar de forma natural el jet lag. Estos comprimidos están hechos con sólo cinco ingredientes activos totalmente naturales: manzanilla silvestre, bane de leopardo, margarita, ipecacuana, y clubmoss.

Este remedio homeopático le ayudará a aliviar los síntomas del jet lag que afectan a la temperatura corporal, los latidos del corazón, la presión sanguínea y los patrones fisiológicos. Basta con masticar un comprimido antes de despegar el avión y otro justo al aterrizar (si el vuelo es largo, tome uno cada dos horas) y comprobará y sentirá sinceramente lo eficaces que son.

Nuestro cuerpo segrega de forma natural una hormona llamada melatonina (que regula nuestro ciclo de sueño), pero si le cuesta mucho dormir en los vuelos o en lugares nuevos, existe la opción de tomar un suplemento de melatonina totalmente natural. Para ser franco: no se ha investigado lo suficiente como para concluir que los suplementos de melatonina ayuden a conciliar el sueño y reducir el jet lag, pero mucha gente confía en ellos y son una alternativa mucho más natural que medicamentos como Ambien o Xanax.

Los aceites esenciales son conocidos por sus increíbles beneficios y se utilizan a menudo en un tratamiento curativo holístico llamado aromaterapia. El aroma de la lavanda, por ejemplo, es conocido por sus propiedades calmantes. Aunque los estudios no han explorado el uso del aceite de lavanda para el jet lag, existen investigaciones preliminares que sugieren que el aroma de lavanda puede mejorar la calidad del sueño.

Personalmente, me gusta llevar un tubito de aceite de lavanda en roll-on y ponerme un poco en la nuca y los hombros durante un vuelo largo. Me ayuda a calmar y relajar el cuerpo, y noto que duermo mejor.

La mejor forma natural de combatir el jet lag es alimentar y nutrir el cuerpo con los alimentos adecuados. Te lo prometo: si vas directamente de tu vuelo a una reunión de negocios sólo con café y un donut, te sentirás mucho más pesado y aturdido que si alimentas tu cuerpo con algo limpio y denso en nutrientes como un batido. Recomiendo encarecidamente tomar uno lleno de verduras como espinacas, col rizada, espirulina, pepino, apio, menta, perejil y cualquier otra cosa que puedas conseguir.

Sentirás un aumento casi instantáneo de tu energía después de beber algo con tantos nutrientes, y te ayudará a reducir la sensación de desfase horario.

El movimiento es una forma muy sencilla de combatir el jet lag. Levantarse para caminar o estirarse durante el vuelo puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea. Es importante centrarse en la circulación sanguínea, ya que así se suministra oxígeno al cerebro y a otros órganos vitales.

Recomiendo levantarse cada 30-60 minutos durante el vuelo para ponerse de pie, estirarse y caminar un poco para que el cuerpo no esté en estado de shock o dolor cuando llegue a su destino.