Ecosexo: la tendencia sexual que quiere “hacerle el amor a la Tierra”
Los seguidores del ecosexo quieren hacer el amor con la Tierra, entre otras cosas. ¿Conoces esta tendencia?
Este movimiento surgió en 2008, cuando las artistas Elizabeth Stephens y Annie Sprinkle se casaron llevando a cabo una excéntrica ceremonia que daría lugar al primer manifiesto del ecosexo. El la boda, celebrada en Santa Cruz, California, las dos enamoradas declararon su incondicional respeto por la naturaleza, además de prometerse amor eterno y fidelidad, claro. Aunque ya habían mostrado sus intenciones en la boda, decidieron ir más allá creando unas pautas esenciales que acabarían constituyendo el manifiesto del ecosexo.
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“Hacemos el amor con la Tierra. Somos acuófilos, terrófilos, pirófilos y aerófilos. Abrazamos sin pudor a los árboles, masajeamos la tierra con nuestros pies, hablamos eróticamente de las plantas”, dice este manifiesto, del que se entiende que todo esto está más allá de la simple penetración. No se trata de buscar la mera satisfacción sexual, se trata de una conexión física y espiritual.
Después de que este manifiesto se hiciera popular en Estados Unidos, el movimiento fue ganando cada vez más adeptos. Aunque la mayor parte sigue estando en Estados Unidos, el ecosexo se ha extendido a otros países como Francia, Alemania, Chile, Australia o España. Hace unos años, el movimiento Fuck de Forest llevó el ecosexo a otro nivel al proponer a las personas que se grabaran manteniendo sexo con la naturaleza. Estos vídeos pornográficos se subieron a internet y lo que se recaudó con ellos, se donó a distintas organizaciones ecologistas. Visto así, no parece tan malo.
