¿Es saludable la compartimentación?
(¿Qué hay en la caja?
Oh, sólo algunas emociones que no podemos manejar en este momento, así que las guardamos para más tarde. (Casual)
A menudo se considera negativo dividir los pensamientos y sentimientos en "cajas" como mecanismo de afrontamiento, es decir, compartimentarlos. Pero, como la mayoría de las cosas, es algo más matizado que eso.
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"La compartimentación en su forma más sana nos sirve para reducir el riesgo de agotamiento y fatiga emocional", explica Laci James, Directora Clínica del Centro de Salud Mental de San Diego. Sin embargo, la dependencia excesiva de este mecanismo de afrontamiento puede tener consecuencias negativas.
A continuación, Laci y Jeff Yoo, LMFT en Moment of Clarity Mental Health Center, comparten los beneficios de la compartimentación, así como las señales de advertencia de que se está convirtiendo en poco saludable.
"La definición de esta palabra es sencilla. Es 'dividir en secciones o categorías'", dice Laci. "La compartimentación puede utilizarse en muchas áreas diferentes de la vida de una persona, especialmente en áreas que son estresantes. Se refiere a la forma en que categorizamos situaciones, personas y cosas en nuestra mente para dar sentido a las emociones que aparecen como resultado."
Añade que piensa en ello como "'en qué caja pongo esto', casi como si estuviera organizando un espacio caótico y desordenado. Así sé en qué caja buscar cuando intento encontrar algo concreto".
"La compartimentación es crucial en algunos ámbitos de la vida y del trabajo", dice Laci. "Las emociones son una parte importantísima de nuestra vida y son lo que hace que todo valga la pena. Sin embargo, a veces nuestras emociones pueden llegar a ser abrumadoras en ciertos casos, lo que luego nos lleva a tener un mal comportamiento, cambios de humor negativos u otros impedimentos."
"En mi campo de trabajo, un ejemplo de compartimentación es separar mis sentimientos personales de lo que dice un cliente, para poder estar totalmente presente, no juzgar y evitar cualquier prejuicio interno que pueda tener", dice Laci.
"Otro ejemplo es cuando un cirujano tiene que decir a la familia de un paciente que la operación no ha salido como estaba previsto. Ese cirujano tiene que ser capaz de gestionar sus emociones para apoyar a la familia, y no al revés. Imagínese a un cirujano intentando completar una tediosa operación de corazón con los ojos llenos de lágrimas", explica.
A continuación te presentamos cinco casos en los que, según Jeff, compartimentar puede ser beneficioso.
1. Límites
"En todos los ámbitos de la vida necesitamos límites, una línea en la arena, por así decirlo. Compartimentamos las distintas partes de nuestra vida para evitar que se mezclen", afirma.
2. Equilibrio
"Tanto la vida personal como la laboral tienen sus propios factores de estrés. Mantener un equilibrio saludable entre ambas requiere un gran esfuerzo. Cuando estés en el trabajo, céntrate en él. Cuando estés en casa, céntrate en el hogar y la familia", aconseja Jeff. "La clave del equilibrio está en centrarse en los retos y las tareas que tenemos entre manos. Mientras escribo esto, me río entre dientes. Recuerdo cuando me olvidé de apagar la cafetera y, al llegar al trabajo, estaba realmente preocupado de que saltara la chispa de la electricidad y se incendiara mi casa. Me costó concentrarme hasta que pude hablar con un vecino para asegurarme de que mi casa era segura".
3. Resolución de problemas
"Algo que realmente creo que es la clave para la resolución de problemas es permanecer centrado en una cosa a la vez, que es exactamente en lo que consiste la compartimentación", dice Jeff. "Parece que aumenta la capacidad de uno para realizar cualquier tarea cuando está totalmente concentrado".
4. Gestionar el estrés
"La mayoría de las veces, cuando una persona experimenta estrés, no está relacionado con una sola cosa. Es una acumulación de varias áreas de la vida que se vuelven insuperables", dice Jeff. "Si somos capaces de separar nuestros pensamientos e idear un plan de acción dando prioridad a la tarea más apremiante, podemos llevarla a cabo y pasar a la siguiente. Al hacer esto, se reduce el estrés y puede haber claridad mental".
5. Regulación de estados de ánimo/emociones
"Cuando nos enfrentamos a un desequilibrio emocional, nos sentimos agitados. Se pierde la lógica y el estrés interrumpe el flujo del éxito", explica Jeff. "A decir verdad, nuestro estado de ánimo o nuestras emociones interferirán en todas las partes de nuestra vida. Es importante mantener todas las áreas en equilibrio: mente, cuerpo y alma. Cuídate primero, come bien, hidrátate, descansa y concéntrate en tu bienestar. Un paso a la vez, una tarea a la vez, sin grandes problemas".
"Cuando se hace bien, la compartimentación permite respuestas adecuadas que no te debilitan cuando necesitas tomar una decisión o completar una tarea", dice Laci. Sin embargo, se vuelve perjudicial cuando se exagera.
Entonces, ¿cómo saber si te estás pasando?
"Sentirse insensible o hastiado es un ejemplo de compartimentación excesiva", dice Laci. "Si no tienes emociones, es un problema". Añade que si te encuentras falto de empatía, es una señal de advertencia de que probablemente estás entrando en una fase de compartimentación malsana.
"A menudo, evitamos los conflictos cuando compartimentamos nuestras vidas. No es sano ni física ni mentalmente no abordar las emociones importantes. Está bien dejar de hacer lo que estamos haciendo, sentir nuestros sentimientos y expresarlos", dice Jeff. "Para mantenernos en un lugar saludable, necesitamos utilizar nuestros sistemas de apoyo y, a veces, buscar ayuda profesional para procesar nuestros sentimientos y pensamientos de forma saludable. Recuerda que los sentimientos son temporales. Pero pueden bloquear nuestra capacidad de concentrarnos en una tarea".
