Ginecoestética y otros temas relacionados con el cuidado vaginal
El cuidado de la vagina y todo el sistema reproductor femenino es una de las prioridades de toda mujer. Cada una de nosotras entiende la importancia de esto, no solo a nivel de salud, sino también en el ámbito del bienestar emocional.
Para nosotras, la vagina es una zona del cuerpo importante que nos conecta con nuestra propia feminidad y cada síntoma que genere molestias es, además de una alerta, un asunto que requiere total atención.
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De allí que la ciencia y los avances de la tecnología pongan especial énfasis en innovar con tratamientos que solventen las situaciones molestas y nos hagan sentir cómodas y seguras. Precisamente por ello, es fundamental asistir con la frecuencia adecuada al ginecólogo y mantenernos al día.
La ginecoestética, algo que debes saber
Seguramente siempre que vas a una cita médica de este tipo, piensas en ir al ginecólogo. Ahora bien, ¿alguna vez pensaste que también podría interesarte una visita a una clínica ginecoestética? ¿De qué se trata?
Este centro especializado trata distintos problemas de índole sexual, así como cambios que desees hacer en la estética de tus genitales. ¡Así es! La verdad es que este concepto tiene ya bastante tiempo en el ámbito médico, por lo que los avances tecnológicos a nuestro favor son muchos.
Entre los más modernos tratamientos encontramos los Hilos tensores, el Láser Ginecológico y el Ácido Hialurónico. El primero está enfocado en darle a la vagina un aspecto rejuvenecido. Es una excelente opción cuando esta zona del cuerpo se ve afectada por la falta de colágeno y estrógenos, generando flacidez y pérdida de volumen en los labios mayores. Es un tratamiento muy moderno y exitoso, con resultados altamente eficaces.
El láser ginecológico, por su parte, es eficaz para tratar la incontinencia, ya que fortalece el suelo pélvico y ayuda a promover un buen funcionamiento de la vejiga. Y como si esto no fuera bastante, también mejora la elasticidad y lubricación de la vagina, regenerando el tejido vaginal y propiciando la producción de colágeno. Como resultado, se disminuyen las molestias en las relaciones sexuales por resequedad.
Cuándo se recomiendan estos tratamientos
Existen muchos motivos por los cuales las mujeres acuden al especialista en ginecoestética. Uno de ellos es la atrofia vaginal, también conocida como síndrome genitourinario de la menopausia. En este se observan una serie de síntomas molestos que se presentan usualmente en la etapa de la menopausia.
Estos suceden debido a una disminución en la producción de estrógeno, lo que genera resequedad, inflamación de las paredes y pérdida de volumen vaginal. Entre los síntomas es frecuente sentir escozor, ardor, e incluso dolor al momento de tener relaciones sexuales.
Sin embargo, esto no sucede únicamente durante esta etapa de la vida, ya que la atrofia vaginal también está relacionada con algunos problemas de la vejiga, incluyendo infecciones urinarias, incontinencia e incluso dolor al momento de orinar.
Uno de los mayores problemas cuando nos encontramos ante la atrofia vaginal es que, lejos de mejorar o disminuir con los años, se hace más agudo. Algo que se relaciona directamente con la disminución de estrógenos.
Además de este problema, existen otras causas para realizar una consulta ginecoestética. Por ejemplo, los traumatismos generados por los partos, que en algunos casos pueden llegar a producir molestias o inseguridad, afectando la autoestima de la mujer.
La mayoría de estos tratamientos ofrecen una solución efectiva que incluso es ambulatoria y solo requiere unas pocas sesiones para que puedas disfrutar de los resultados. Así que no dudes en hacer una consulta profesional y contar tus inquietudes y molestias para que el ginecólogo pueda ofrecerte la solución más acertada para tu caso.
La importancia de una consulta ginecológica
Todas las mujeres lo sabemos muy bien, pero siempre valdrá la pena recordarlo. Una visita anual al servicio de ginecología nos mantendrá mucho más sanas, alertando a tiempo sobre posibles patologías. Sin importar la edad.
Asistir con frecuencia al ginecólogo es algo que debes mantener en tu agenda sin importar en qué etapa de tu vida adulta te encuentres. Para las mujeres jóvenes, es fundamental llevar un control de la evolución de su cuerpo, recomendaciones adecuadas para una vida sexual sana e incluso, planificar una familia en el momento oportuno.
Conforme pasa el tiempo, estas visitas son necesarias para monitorear el aparecimiento de signos de atrofia vaginal u otras patologías que pueden tratarse de forma más efectiva si se detectan a tiempo.
Los ginecólogos se especializan en estos tratamientos, manteniéndose en constante contacto con los avances médicos y tecnológicos que resulten beneficiosos para las pacientes. Estos médicos están preparados para recomendar y realizar los tratamientos adecuados para cada caso, incluyendo las cirugías con los más modernos equipos, como la endoscopia.
Idealmente, estas visitas al ginecólogo deben realizarse anualmente, a menos que el especialista recomiende algo diferente, sobre todo si es necesario hacer seguimiento de alguna condición o tratamiento aplicado.
¿La ecografía vaginal es necesaria?
Por supuesto que sí. La ecografía vaginal es un examen donde literalmente el ginecólogo puede obtener una imagen real de las condiciones en las que se encuentra toda la zona genital.
Durante este examen, el especialista observa los ovarios, el útero, las trompas de falopio, el cuello uterino y la zona pélvica, de manera detallada. La ecografía vaginal se recomienda anualmente como parte de la rutina de la visita al ginecólogo, pero también es posible que sea recomendada en otras circunstancias.
Por ejemplo, si presentas un sangrado inusual, dolor pélvico o cualquier síntoma de alerta, es posible que el especialista recomiende realizar este examen para poder ofrecer un diagnóstico más completo.
Si en alguno de los exámenes se ha detectado una anomalía, como la presencia de pólipos o fibromas, se pedirá una ecografía para observar la evolución de los tratamientos o descartar enfermedades como el cáncer de útero, vagina y ovarios.
La ecografía vaginal también se puede acompañar de buenas noticias. De hecho, este es un examen que debe realizarse mensualmente durante la gestación para monitorear el desarrollo del embrión. De esta manera, el médico obstetra puede controlar el embarazo y tú como madre tienes la oportunidad de disfrutar de una imagen en tiempo real de tu futuro bebé.