Kate Winslet y su cruzada contra la cirugía estética

Kate Winslet está harta de las caras acartonadas de Hollywood. No queremos mirar a nadie... pero hay actrices que no sabríamos si lloran o ríen si no fuera porque las lágrimas brotan de sus ojos. Bueno sí, digamos nombres y apellidos, Nicole Kidman, Meg Ryan, Cher... todas ellas se han quedado con la cara tan planchada que no hay rastro de las expresiones que antes la poblaban. Lo bueno es que la sonrisa les ha quedado perenne, como al Joker. Cuánto más lo pienso más mérito le veo, no es fácil haberse operado tanto hasta parecer una muñeca.

Kate no está dispuesta a renunciar a sus arrugas, y como ella Rachel Weisz y Emma Thomson, que hartitas están de que en su profesión la que tiene cincuenta quiera pasar por concursante del Mójate. Ellas se niegan a perder su esencia por parecer chiquillas.

Y en un alegato a lo 15M ellas Indignadas (pero por lo suyo) dicen "Nunca me rendiré. Va en contra de mi moral, la forma en que mis padres me criaron y lo que considero que es la belleza natural". Pues dicho queda. ¿Tendrán los mismos problemas con el Photoshop?