La camiseta feminista de Carmen Calvo y el NO de las españolas a VOX
La camiseta feminista de Carmen Calvo y el NO de las españolas a VOX.
El trío de Colón ha fracasado. Las encuestas pronosticaban el auge de la extrema derecha en España y nosotras estábamos un poquito preocupadas ante la posibilidad de que VOX nos gobernase. Ahora, las urnas han hablado y los españoles y españolas le han dicho que no a la extrema derecha, le han dicho que no a la derecha y le han dado un SÚPER NO a la vuelta del franquismo a las instituciones. Gran culpa de ello la tienen todos los mensajes machistas, racistas u homófobos que la formación verdiblanca ha ido volcando en las redes y en sus discursos durante los últimes meses.
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Un resultado que pone de manifiesto que quien no quiera contar con las mujeres, los colectivos o los inmigrantes en sus políticas, se equivoca, al estar hablando de un grueso poblacional decisivo en cualquier votación. En España no solo hay casi un 10% de población LGBT, sino que desde hace muchos años hay más población de mujeres que de hombres.
Las urnas le han dicho que no también a Cayetana Álvarez de Toledo, quien demostró a lo largo de la campaña electoral ser una marquesa de lo más machista, sus polémicas declaraciones sobre la violación y los abusos sexuales acabaron condenando aún más a su partido, acercándolo a la extrema derecha machista y orgullosa de serlo. El Partido Popular atraviesa ahora graves problemas y es que con 66 escaños, sus propios dirigentes no son capaces de garantizar la supervivencia de un partido que puede que tenga que vender sus propiedades, sedes y prescindir de muchos trabajadores. Toca ahora reconstruir el partido, quizás con un talante más inclusista y centrista como el que hasta hace no mucho esgrimía Soraya Sáenz de Santamaría.
En lugar de todo ello, España obtuvo una amplia victoria progresista y de izquierdas, ya fuese en su vertiente más republicana, sindical o socialista. Carmen Calvo, próxima vicepresidenta del gobierno escenificaba esta imagen mejor que nadie saliendo a saludar a la militancia del PSOE con una camiseta que rezaba "YES, I´M A FEMINIST" y que ya hoy se ha convertido en un icono nacional.
España ha votado a favor de la socialdemocracia feminista y en contra de la extrema derecha. Todas las mujeres españolas estamos de enhorabuena.