Las barras de labios de Rimmel London se ganan nuestro aprecio
Os voy a decir una cosa y quiero que os quede muy clara: no tiene nada de malo comprar cosmética asequible. Nada. No os penséis que os vais a echar la cara a perder, que sólo se está verdaderamente guapa con productos que no bajan de los 30 euros, o que la calidad es cara. Todo eso es mentira. Comprar productos de belleza de alta gama (que es muy lícito) es comprar la marca y un packaging cuidadísimo, pero contestadme a una cosa: ¿Qué vais a hacer con la barra de labios? ¿os vais a pintar con ella o la vais a estar engorando todo el día? Pues eso.
Una de las marcas que últimamente más me gusta y que mejores precios tiene es Rimmel London (no me han pagado, lo prometo). Estoy como loca con sus barras de labios, en mi opinión unas de las mejores que he probado, con excelente pigmentación, buena durabilidad, muy cremosas e hidratantes. Las de la colección de Kate Moss son sensacionales, no les puedo poner un simple "pero", pues a todas las ventajas que os he dicho arriba, se suma la paleta de colores tan incríble que tiene, de plena actualidad y en la que podemos encontrar desde rojos encendidos, a nudes o a colores tinto para aquellas que se pierden por las tendencias.
Probamos las barras de labios de Kate Moss para Rimmel London Los tintes de labios ganan la batalla a las barras tradicionales
Otro de los productos que me tienen fascinados de esta marca, son los esmaltes de uñas. En serio. Son una pasada. Ninguno otro me dura tanto puesto sin descascarillarse, y no tiene punto de comparación con el precio que tienen otras lacas de uñas que se suponen que son las "preferidas por los salones de manicuras"...