Los 7 mejores consejos para aprender a dar un masaje como un profesional
Si estás buscando una forma de mejorar tu relación con tu pareja, prueba a darle un masaje. Claro, si no eres un profesional, averiguar cómo dar un masaje sin hacerle daño o, peor aún, sin que sea demasiado suave (yikes) puede parecer complicado. Pero merece la pena.
El contacto físico no sólo puede aumentar la intimidad de su relación, sino que también puede ayudar a su pareja a descomprimirse y deshacerse de parte de su estrés, dice Ashley Dwyer, terapeuta de masaje licenciada en Carolina del Norte y autora de Massage for Couples: Heal, Soothe, and Connect with the One You Love. "A veces, cuando entramos en un espacio de vivir en nuestra cabeza en lugar de en el presente, tenemos una mayor ansiedad. La razón por la que la reducción de la ansiedad es un beneficio del masaje es su factor de conexión a tierra", dice Dwyer. Al relajar el cuerpo, nuestras relaciones pueden recuperarse más fácilmente del estrés y las tensiones de la vida cotidiana.
Dwyer también señala que el masaje responde a cada uno de los cinco lenguajes del amor, no sólo al contacto físico. "Es tiempo de calidad, ya que no puede cumplirse virtualmente, es un acto de servicio, fomenta las palabras de afirmación porque hay que comunicarse, e incluso puede iniciarse con un regalo, como un libro sobre masajes, un buen aceite esencial o una loción especial para masajes".
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El aspecto del contacto físico, en particular, puede ayudarte a profundizar en tu relación. "Cuanto más cómodo te sientas con alguien en tu cuerpo y en tu piel y siendo vulnerable, más crecerá la intimidad y la conexión en esa relación", dice Dwyer. Además, tu autoestima se verá reforzada por la validación que te ofrece tu pareja.
Aparte de todos estos beneficios, recibir un masaje simplemente sienta bien. Así que, si quieres regalarle algo especial a tu pareja, aquí tienes siete consejos para convertirte en un profesional de los masajes.
1. Realice el masaje en un lugar en el que se sienta cómodo.En una relación más reciente, un masaje puede ser una señal de apoyo. Dwyer dice que algunas parejas pueden estar de acuerdo con pequeñas muestras de afecto en público, como masajear el cuello, el hombro o la espalda mientras están en un evento público o de compras. Pero antes de hacerlo, siempre hay que asegurarse de haber recibido un claro consentimiento de que tu pareja está de acuerdo con que la toques.
En una relación más íntima, Dwyer dice que es posible que el masaje se realice en casa. "Podéis frotaros los pies mutuamente en el sofá del salón viendo la televisión...", sugiere. Querrás elegir un lugar que sea cómodo, por lo que Dwyer recomienda evitar los espacios con caos que también pueden distraer, como las habitaciones ruidosas o con desorden.
2. Puedes utilizar accesorios, como música y velas, para crear ambiente.Una vez que hayas elegido el lugar, querrás elevar el ambiente poniendo música instrumental suave (algo con palabras puede distraer), encendiendo una vela o usando aceites esenciales. Esto puede hacer que tu pareja se concentre en el aquí y ahora apelando a sus sentidos, dice Dwyer. También querrás eliminar las distracciones apagando los dispositivos, como el teléfono y la televisión. Dwyer también sugiere mantener una iluminación tenue, así que evita las luces fluorescentes.
3. Asegúrate de tener a mano las herramientas adecuadas, como lociones o aceites de masaje.Lo primero es comprobar si tu pareja tiene alguna alergia y, en caso de que la tenga, leer cuidadosamente los ingredientes. "No querrás usar aceite de almendras dulces y luego descubrir que es alérgico a los frutos secos", dice Dwyer. También debes guardar las cosas en una cesta o cajón cercano para que sean fácilmente accesibles. "Prepara las cosas con antelación o tenlas a mano para cuando tengas intención de sacarlas", sugiere Dwyer.
Algunas opciones de herramientas de masaje incluyen aceites esenciales, lociones que puedes calentar suavemente en el microondas o velas de masaje, aunque Dwyer dice que debes tener en cuenta sus temperaturas. "Pruébalo en ti mismo antes de ponérselo a ellos. No hay nada que arruine literalmente el momento como una quemadura", dice Dwyer.
4. Deja que tu pareja determine la presión.Puedes preguntarle si es demasiada o insuficiente. "Si se tensa o hace una mueca de dolor es probablemente una señal de que se siente incómodo", dice Dwyer. "...Nunca hay que herir intencionadamente al otro, ni siquiera jugando".
Aunque no quieras presionar las manos de tu pareja tanto que resulte incómodo, Dwyer dice que hay una variedad de movimientos y técnicas que puedes poner en práctica. "Una presión más fuerte es buena para los músculos tensos. Un toque suave y firme puede desarrollar más confianza y ayudar a tu pareja a relajarse más. Un toque ligero puede ser mucho más sensual", explica Dwyer.
También añade que escuchar y comunicarse con la pareja para averiguar sus necesidades puede crear una confianza y una conexión más profundas.
5. Lo mejor es empezar por el cuello.Pero en realidad puedes empezar por cualquier parte, ya que el masaje es bastante indulgente, dice Dwyer. Para masajear correctamente el cuello, Dwyer sugiere que tu pareja se siente en una silla o se recueste con la cabeza en el borde de la cama o en tu regazo. A continuación, debes acunar su cabeza y hacer círculos suaves, o simplemente sostener la zona tensa donde la cabeza se une al cuello. "Aquí es donde a menudo se producen las cefaleas tensionales y se mantiene el estrés por estar todo el día pendiente de las llamadas y del ordenador", dice Dwyer.
Puede continuar con el masaje del cuello bajando suavemente las manos hacia los hombros barriendo lentamente hacia abajo o continuando haciendo pequeños círculos con las puntas de los dedos.
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6. Masajear la espalda puede requerir algunas técnicas.Dwyer dice que al masajear la espalda le gusta empezar por el cuello con ambas manos a ambos lados de la columna vertebral, mientras desliza las manos hacia abajo hasta la parte superior de las caderas. También puedes hacerlo con los puños si quieres aplicar más presión.
Dwyer dice que los hombros y la parte superior del cuerpo suelen soportar más presión que la parte inferior de la espalda, que a menudo puede resultar más sensible para tu pareja, así que asegúrate de comprobar de vez en cuando que están cómodos.
No tengas miedo de aplicar un poco más de presión cuando encuentres un punto que te resulte tenso. Para solucionarlo, Dwyer recomienda probar con una fricción circular en la zona. "Utiliza las yemas de los dedos para frotar ligeramente la zona con un movimiento en el sentido de las agujas del reloj o en sentido contrario hasta que sientas que se ha liberado", dice. Otra opción es pellizcarlos ligeramente. "También puedes presionar la zona y mantener el punto con un dedo, el pulgar o el puño hasta que se relaje y ceda. O pellizcar o hacer rodar [los dedos] a lo largo de la zona, levantando el músculo suavemente del hueso", dice Dwyer.
7. No te pases con las extremidades, las manos y los pies.Cuando trabajes con los brazos y las piernas, debes trabajar hacia el torso en lugar de alejarte de él para favorecer el flujo sanguíneo natural, dice Dwyer. Otra técnica que puedes emplear es la de rastrillar o barrer con las manos los brazos o las piernas con movimientos largos y suaves. Para ello, se pueden tomar las dos manos en forma de copa en el lado exterior o interior de la extremidad, recoger el tejido muscular (como si se pellizcara) y tirar de él para ayudar a aumentar la circulación.
En lo que respecta a los dedos de las manos y de los pies, puedes probar a masajearlos con los dedos en pequeños círculos, o a tirar suavemente de ellos, lo que, según Dwyer, puede resultar más agradable de lo que parece.