Prada deja a Milán sin aliento

Prada deja a Milán sin aliento

Prada, oh Prada, Prada… Miuccia lo ha vuelto a hacer, es la inconfundible reina de Milán y temporada tras temporada nos vuelve majaretas con colecciones perfectas. Esta vez la cosa va por la espíritu retro, los 50’s y una colección de complementos excepcionales.

Esta vez Miuccia Prada, acostumbrada a proponer reflexiones y conceptos referenciales profundos, tira por la tangente. La dulzura es la cualidad que inspira su colección para el verano 2012, una cualidad según la diseñadora, intrínsecamente femenina y sumamente castigada por la industria de la moda.



Prada se centra en las dos cosas preferidas por los hombres (topicazo al canto): las mujeres y los coches. Este imaginario le viene al dedillo con la década de los 50 de por medio, estampados de estilo rockabilly con coches, llamaradas de fuego y mujeres tipo Marilyn. Luego esas mujeres… qué decir, marcando cintura y feminidad, pecho, cadera y ondas al agua en su pelo.

Se ve a Marilyn desfilando para Prada, con los plisados súper sexys y en lo que parecía un andén de metro, poco le debió faltar a Miuccia para hacer que el viento volara de forma traviesa esas faldas… Pero la colección es mucho más. Desfilando vimos cazadoras de cuero con tachuelas de strass en las costuras, faldas lápiz combinadas con tops tipo bandeau que daban un aire inocente; prendas de cuero y piel con coches y llamaradas cosidos; plisados con graffitis automovilísticos, joyería con flores y brillantes…

Hay lugar para las transparencias y el encaje, para la feminidad más absoluta de los 50 y 60, con sus flores de pasamanería y un gran trabajo de las superficies, con bordados e incrustaciones brillantes. Las pinups también tienen su hueco, en trajes de baño de colores y esos zapatos… Los complementos de Prada siempre son dignos de mención pero en esta ocasión es para darles de comer aparte.

Los zapatos y bolsos de Prada primavera/ verano 2012 son excepcionales, capas de piel de distintos colores imitando esa iconografía de los 50 y los coches, con bolsos de mano con un aire retro y gamberro y zapatos… Los zapatos son sandalias de tacón de aguja de las que salen llamaradas, con lazos y flores, una mezcla de lo femenino y lo masculino prácticamente imposible que sólo Miuccia puede hacer realidad.

Una servidora espera ser rica antes de que esta colección llegue a las tiendas. ¿Te gusta?