Prueba estos trucos para un estilo perruno sin dolor
Muchas mujeres experimentan dolor en las relaciones sexuales en algún momento de su vida. Esto puede deberse a varias razones, pero las dos más comunes son la tensión de los músculos del suelo pélvico y la mala salud de la fascia pélvica.
Así es: tu suelo pélvico no debe estar tenso. Y si lo está, la postura sexual del perrito, entre otras, puede dolerte a veces o todo el tiempo.
El dolor punzante en la zona pélvica para las mujeres nunca es algo bueno, y cuando quieres probar el estilo perrito o posturas sexuales similares, simplemente no funciona. La mayoría de las posturas que implican estar sobre las manos (o los codos) y las rodillas inclinan la pelvis y pueden causar dolor, sobre todo a las que tienen una tensión excesiva en el suelo pélvico.
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El dolor en estas situaciones puede deberse a un suelo pélvico hipertónico, una afección en la que los músculos del suelo pélvico permanecen tensos y no pueden relajarse.
El suelo pélvico, que rodea la vagina, da la sensación de tirantez. Si el suelo pélvico está demasiado tenso, puede causar dolor y problemas al ir al baño y durante el coito.
¿Qué puede hacer una mujer? Restablecer la tensión adecuada en el suelo pélvico puede ayudar a aliviar las relaciones sexuales dolorosas.
Siga leyendo para descubrir algunas técnicas sencillas, junto con métodos más permanentes, que ofrecen una solución natural.
1. Relaja el suelo pélvico. A menudo cargamos con mucha tensión y emociones fuertes en el suelo pélvico, lo que puede provocar espasmos. Concéntrate en el suelo pélvico cuando estés en esta posición e imagina que se estira. Ajusta la inclinación de las caderas y encuentra una postura que te resulte más cómoda.
2. 2. Respira profundamente. Concéntrate en la respiración diafragmática. Al inhalar profundamente, visualiza y siente cómo el suelo pélvico desciende y se relaja suavemente. Una respiración superficial hace que el suelo pélvico se vuelva rígido y tenso y no aliviará las relaciones sexuales dolorosas.
3. Utiliza lubricación natural. Aunque deberías hacer regularmente ejercicios de suelo pélvico y trabajo fascial para la salud del suelo pélvico (incluso a los 20 años), la lubricación natural favorece una penetración más suave y menos fricción durante las relaciones sexuales.
4. Encuentra una velocidad y profundidad cómodas. En esta postura, tu pareja suele penetrar más profundamente, a veces tocando el cuello del útero, lo que puede resultar doloroso para algunas mujeres. Las embestidas fuertes también pueden resultar dolorosas, por lo que es importante que en esta postura, y en todas las demás, utilices tus palabras para comunicar la velocidad y profundidad que deseas.
Los consejos anteriores pueden proporcionar alivio a algunas mujeres, pero otras tienen un nivel de tensión extremadamente alto que requiere un enfoque diferente. Las relaciones sexuales dolorosas pueden deberse a una disfunción del suelo pélvico. En estos casos, debe abordarse la causa principal para restaurar el tono y la elasticidad del suelo pélvico.
Los ejercicios (no, no los Kegel) pueden ayudar. Céntrate en ejercicios que fortalezcan el suelo pélvico y lo ayuden a relajarse con contracciones concéntricas y excéntricas. Consulta los posibles ejercicios con un médico o un fisioterapeuta cualificado para obtener consejos más personalizados.
Reconozcámoslo: el sexo doloroso no es lo que queremos la mayoría de nosotros. Puede causar estragos en el deseo sexual, la relación y la autoestima. Aunque algunas personas lo ignoran, utilizar estos ajustes y trabajar para mejorar la salud pélvica para una solución más permanente puede transformar su vida sexual.
