Puntos a tener en cuenta sobre el corte de digestión
Desde muy pequeños hemos escuchado que meternos de repente en la piscina era malo para la salud, ya que podía ocasionarnos un corte de digestión. Este miedo nos ha acompañado a la mayoría de nosotros a lo largo de los años, y nunca le hemos dado importancia por considerar que se trata simplemente de un mito de gente antigua o pasada de moda. Nada más lejos de la realidad, ya que el corte de digestión existe y nosotros vamos a ver por qué se produce y como evitarlo. El corte de digestión se produce cuando la temperatura de nuestro cuerpo cambia de manera brusca, es decir, cuando la piel se enfría al entrar en contacto con el agua y la sangre debe por lo tanto igualar la temperatura desplazándose a las capas más superficiales de la piel. En el caso de un proceso digestivo, este cambio de dirección de la sangre es la que provoca el temido corte de digestión, ya que la mayoría de la sangre del cuerpo está concentrada en el aparato digestivo después de comer, al desplazarse deja esta parte sin riego y se produce el corte de digestión con sus efectos tan nocivos para el organismo. Normalmente el corte de digestión se produce cuando nos metemos al agua de manera brusca habiendo comido antes, pero no siempre esta es la manera de padecer un corte de digestión, sino que existen otros motivos por los que se produce como la ingesta de alimentos demasiado fríos que provocan en nuestro organismo un cambio brusco de la temperatura del mismo.