Quería ser vegetariana, pero mi cuerpo necesita carne

Cómo conozco este camino. Muchos de nosotros hemos estado aquí antes.

De hecho, mi viaje hacia el bienestar pasó por una fase vegana cuando tenía 19 años, después de leer el libro Skinny Bitch. Perdí mucho peso al principio, sólo para volver a recuperarlo no tan lentamente. Estaba tan apegada a mi etiqueta que la mantuve durante años en público mientras pedía en secreto tartas de queso y postres a mi apartamento del East Village y compraba casi todas las noches pintas de helado no vegano en la bodega de la esquina.

Años más tarde, tras mudarme a Los Ángeles y dejar atrás mi anterior identidad dietética, comencé un viaje de sanación antes de que Instagram existiera y de que la gente utilizara ese término. Senderismo, sol, clases de barre y cocinar para mí misma con los productos locales famosos de Los Ángeles.

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Me sentía increíble. Mi pensamiento era claro, mi piel estaba limpia y me sentía física y emocionalmente más ligera. Este camino me ayudó a darme cuenta de que quiero ayudar a la gente a sentirse bien en su cuerpo.

Hoy en día, la proteína de alta calidad y mínimamente procesada es mi prioridad a la hora de comer. Nunca me he sentido más feliz, más fuerte y más a gusto con mi cuerpo. Mi peso ya no fluctúa mensualmente y mis antojos de dulces siguen apareciendo (¡soy humana!), pero ya no controlan mi vida.

Entremos en materia científica.

Hay algunos factores a tener en cuenta cuando se habla de una ingesta adecuada de proteínas. Siempre les digo a mis clientes que, cuando tomen decisiones sobre alimentación, se pregunten: "¿Esto está en consonancia con mis objetivos a largo y corto plazo?".

Lo que deseo para mí y para todas las personas es una larga vida llena de facilidad y comodidad, la capacidad de moverte como quieras y hacer las actividades que desees, y mantenerte con energía para todas las cosas que quieras conseguir.

Si quieres sentirte lo mejor posible en tu cuerpo -energética, física, estética y espiritualmente-, lo que te ayudará a conseguirlo y a mantenerlo es hacer hincapié en una ingesta adecuada de proteínas.

Antes de entrar en materia, debes saber que todas las decisiones tienen matices y que yo apoyo todas las decisiones que tomes con conocimiento de causa. A lo largo de los años, he tenido la sensación de que este movimiento específico juega un papel muy importante en la toma de decisiones emocionales, siendo la culpa y la vergüenza los factores impulsores. Desgraciadamente, no ha habido suficientes teorías opuestas e información disponible para contrarrestar los esfuerzos que se han dedicado al movimiento en su conjunto.

Bien, ¡volvamos a la ciencia!

Las proteínas ayudan al cuerpo a mantenerse saciado durante largos periodos de tiempo y tienen muy poco efecto sobre los niveles de insulina. Los niveles elevados de insulina afectan a la energía, el estado de ánimo y la capacidad para perder peso o mantenerlo.

La proteína es también el macronutriente con mayor efecto térmico. El alto efecto térmico de los alimentos (TEF), se refiere al número de calorías que su cuerpo utiliza para digerir, absorber y procesar los nutrientes de sus comidas.

Míralo como un truco para sentirte mejor y equilibrar tu peso.

Intenta ingerir entre 20 y 30 gramos de proteínas por comida, y verás que el hambre y los antojos aparecen de forma más atenuada. Esto es libertad. Pruébalo durante una semana y verás lo que quiero decir.

Además, estamos envejeciendo.

Siento sacar el tema, pero si quieres mantener tu cuerpo en movimiento con facilidad, libre de molestias y lesiones, tus músculos y articulaciones necesitan unos niveles adecuados de proteínas. Tu precioso cerebro también necesita proteínas para mantener la neuroplasticidad, que te mantiene agudo e inteligente con el paso de los años.

Por lo tanto, las proteínas de calidad no sólo mantienen estable el nivel de azúcar en sangre, sino que también aumentan la tasa metabólica y ayudan a mantener la energía, la fuerza, la saciedad y la agudeza durante todo el día y en los años venideros.

La proteína, junto con la grasa y la fibra, ayuda a nuestro cuerpo a funcionar de forma óptima. El enfoque en mi práctica, Soul Wellness Method, es sentirse fuerte y empoderado en su cuerpo. Logramos esto centrándonos en la salud intestinal y hormonal a través de los alimentos que comemos y las decisiones que tomamos para una vida moderna bien redondeada.

Es importante tener en cuenta que somos mucho más que los alimentos que comemos.

Sí, la nutrición nos ayuda a ser quienes queremos ser en el mundo cuando llenamos nuestros platos de verduras por encima de la tierra, proteínas y grasas beneficiosas como el aceite de oliva y el aguacate. Pero también hay que dar prioridad al movimiento, la comunidad, el tiempo a solas, la autoexpresión y la forma de hablar con uno mismo. Estas son las claves del bienestar moderno y los principios básicos de mi metodología-método de bienestar del alma.

Como he dicho antes, todo tiene matices. Tu bienestar es tan complejo e individual como tú. Aquí tienes una lista de cosas que debo hacer para llevar una vida vibrante.