Todo lo que ha dicho Kesha sobre la superación de sus problemas de imagen corporal

Cuando Kesha lanzó su primer single en 2009 (a través de Biography), rápidamente saltó a la fama. Según Rolling Stone, "Tik Tok" hizo historia en la música. Se descargó 610.000 veces, "el mayor total digital para una artista femenina en una semana desde que Nielsen SoundScan empezó a registrar las cifras". Incluso antes de que su primer álbum oficial, "Animal", saliera a la venta a principios de 2010, Kesha se había asegurado un seguimiento masivo.

Sin embargo, el éxito de Kesha se vio empañado por los supuestos abusos de su antiguo productor, Dr. Luke. La cantante sufrió abusos sexuales, emocionales y físicos a manos del productor, que negó todas las acusaciones y alegó difamación (según Vulture). Según la madre de Kesha, Dr. Luke presionó a su hija para que perdiera peso, y la cantante entró en tratamiento por un trastorno alimentario a principios de 2014. Ese mismo año, Kesha demandó a su antiguo productor, con la esperanza de "anular todos los contratos", según Rolling Stone.

Incluso ahora, la lucha de la cantante está lejos de terminar, ya que sigue defendiéndose en el caso de difamación de Dr. Luke, como señala Billboard. Durante los últimos años, la música de Kesha ha servido como plataforma de autoestima, permitiéndole abordar traumas pasados mientras trabaja para romper los lazos con su antiguo productor. Su exitosa canción, "Praying", alcanzó el estatus de himno después de una emotiva actuación en vivo en los Premios Grammy 2018 (vía CNN). Kesha también ha hablado con franqueza sobre sus luchas con la imagen corporal, actuando como un modelo a seguir para los fans que se enfrentan a sus propias inseguridades.

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Kesha se sintió atrapada por los comentarios positivos

Al mismo tiempo que sufría los presuntos abusos de Dr. Luke, Kesha se enfrentaba a las presiones impuestas por los medios de comunicación. En un artículo de opinión para Elle, la cantante criticó los rígidos cánones de belleza de la industria musical, señalando cómo "establecen expectativas poco realistas sobre cómo debe ser un cuerpo, y yo empecé a ser demasiado crítica con mi propio cuerpo por eso". La cantante dijo a Vogue en 2015: "Por dentro era realmente infeliz, pero por fuera, la gente decía: 'Wow, te ves muy bien'". Más tarde le dijo a ET: "Simplemente decían: '¡Oh, Dios mío, sigue haciendo lo que sea que estés haciendo! Estás tan guapa, tan impresionante'".

Al sentirse atrapada por estos "halagos", la cantante se dio cuenta de que necesitaba ayuda, y confió en su madre. Durante su entrevista con ET, Kesha dijo: "Recuerdo haber temblado porque estaba tan harta, tan ansiosa, y estaba enojada por haberme permitido llegar a ese punto." Se registró en un centro de recuperación en 2014. Kesha pudo hablar con un nutricionista y finalmente llegó a comprender que "la comida es algo positivo para tu cuerpo", según Vogue. Concluyó que "estar sana es lo más importante que puedo hacer por mí misma".

Si estás luchando contra un trastorno alimentario, o conoces a alguien que lo está, hay ayuda disponible. Visita el sitio web de la Asociación Nacional de Trastornos Alimentarios o ponte en contacto con la línea de ayuda en directo de NEDA en el 1-800-931-2237. También puedes recibir ayuda en caso de crisis las 24 horas del día, los 7 días de la semana, a través de mensajes de texto (envía NEDA al 741-741).

Kesha tomó la decisión de ser amable consigo misma

En los años transcurridos desde que comenzó su viaje de recuperación, Kesha ha experimentado una hermosa transformación. Parte de ello es tomar la decisión consciente de quererse a sí misma. Según la estrella, a través de Vogue, "cada día tengo que mirarme al espejo y tomar la decisión de ser amable conmigo misma. Esto es lo que soy: tengo que amarlo". La cantante ha desempeñado un papel constantemente activo en su propio viaje de recuperación, admitiendo que "A veces es difícil". Sin embargo, para ella, "parte de estar sano es ser positivo. No presto atención a Internet ni a los bloggers. Me rodeo de gente positiva".

Este amor propio se refleja en su música más reciente, que se centra en gran parte en el empoderamiento femenino, junto con una generosa dosis de brillo característico de Kesha, por supuesto. En 2022, su canción "Woman" fue votada como uno de los 53 "Mejores himnos feministas de todos los tiempos" por Harper's Bazaar. Como explica la cantante en una conversación de 2018 con Cosmopolitan, "no soy una talla. No soy un número". Kesha está orgullosa de ser quien es, y añade: "Francamente, me gusta mi basura. Hace diez años, nunca pensé que podría decir eso".

En 2019, Kesha lanzó su propia línea de belleza, Kesha Rose Beauty. Kesha dijo a Nylon: "La belleza consiste en abrazar lo que eres mientras te mantienes unida sin miedo para celebrar nuestras diferencias. No te esfuerces por la perfección porque ya estás ahí".