Una liposucción de regalo para una niña de 7 años
¿Estamos ante una de las peores madres del mundo? Muy probablemente. Esta no es manera de educar a una niña... ¿Regalarle una lipo para Navidad?
Os presentamos a Sarah Burge y a su hija de siete años, Poppy. Las dos son unas locas de los cuidados de belleza, bien incluyan pasar por el quirófano o bien se queden simplemente en el salón de belleza.
Poppy tiene en su madre su principal fuente de inspiración y quiere ser tal y cómo ésta es, tanto que no duda en querer pasar por el bisturí para que las dos sean igualitas... ¿lo aguantará la humanidad?
La madre no hace más que regalarle talones por el precio de operaciones, que la niña podrá usar cuando alcance la edad para operarse (ufffff, menos mal!).