Uno de cada diez padres sufrirá depresión.

A principios de esta semana, la BBC emitió mi documental "Becoming Dad". Hacer el documental ha sido una de las cosas más desafiantes, esclarecedoras, difíciles y sorprendentes que he hecho en mi vida.

A veces fue un reto porque mi familia y yo tuvimos que revivir algunos de los momentos más difíciles de nuestras vidas. Ver a mi mujer hablar del nacimiento de nuestra hija todavía me emociona.

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Nuestra hija nació con una infección llamada estreptococo del grupo B. Es una infección grave, de la que uno de cada diecinueve bebés morirá y otro de cada catorce desarrollará una discapacidad grave de por vida. Cuando nuestra hija nació estaba gris y sin vida y hubo que reanimarla. Mi mujer también estaba mal y perdió mucha sangre. Pasamos 10 días en cuidados intensivos. Fueron los diez días más difíciles de nuestra vida.

Cuando volvimos del hospital, pasé unos días en casa y luego volví al trabajo. De vuelta a la normalidad. Pero después de haber vivido los días más traumáticos de mi vida, me encontré con que el mundo seguía girando y tenía un trabajo que hacer en casa, y en el trabajo.

Me costó aceptar, comprender o procesar lo que había sucedido durante el nacimiento de mi hija. Lloraba de camino a casa, tenía experiencias extracorporales en las reuniones de trabajo y sufría de insomnio. Al final me diagnosticaron TEPT.

Mi experiencia me llevó a crear mi grupo de apoyo para padres, llamado MusicFootballFatherhood. Y es a través de ese trabajo que he conocido a muchos más padres que han experimentado algo similar.

Ahora sé que uno de cada diez padres experimentará algún síntoma de depresión postnatal en los primeros seis meses de vida de su bebé y que hasta un 5% de los nuevos padres desarrollará un TEPT después de presenciar el nacimiento traumático de su hijo. Estas cifras son elevadas. Y el impacto de la mala salud mental de los nuevos padres puede tener consecuencias devastadoras para toda la familia.

Cuando los padres experimentan una mala salud mental, pueden tener dificultades para establecer un vínculo con su bebé, apoyar a su pareja y mantener un horario de trabajo productivo. Los nuevos padres corren el mayor riesgo de experimentar ideas suicidas que en cualquier otro momento de sus vidas.

A menudo, los nuevos padres no buscan ayuda profesional ni hablan con nadie sobre lo que están experimentando. Yo no lo hice.

El reto que tenemos todos es normalizar que los hombres y los padres hablen de su salud mental. Tenemos que hacer más para ayudar a los hombres a alejarse de las ideas tradicionales, anticuadas y francamente perjudiciales de ser un hombre.

Esas ideas significan que sentimos que no podemos buscar ayuda o apoyo, que tenemos que ser estoicos y lidiar con todos nuestros problemas nosotros mismos. Esas ideas significan que nos sentimos presionados para ser el sostén de la casa y que no podemos trabajar a tiempo parcial o tomarnos un permiso de paternidad prolongado.

Entonces, ¿qué podemos hacer todos para ayudar? Bueno, a nivel individual podemos trabajar para aumentar nuestra comprensión de la salud mental perinatal de los padres. Y podemos trabajar para establecer relaciones más profundas y vulnerables con nuestros amigos, colegas y familiares varones. Podemos mantener conversaciones abiertas y sin prejuicios, escuchar y ser una fuente de consuelo y apoyo.

En general, necesitamos una reforma en el NHS que permita a los padres participar y recibir apoyo en el proceso de maternidad. Algunos centros del NHS lo hacen muy bien, como el Gran Manchester, donde tienen un servicio integrado llamado Dad Matters, pero necesitamos un enfoque coherente en todo el país.

También necesitamos un permiso de paternidad debidamente remunerado y trabajos flexibles por defecto. Estas peticiones fueron el núcleo de la reciente Marcha de las Mamás organizada por Pregnant Then Screwed. Apoyar a los padres para que sean padres activos, implicados y sanos es beneficioso para toda la familia y para la sociedad en su conjunto.

Mi documental "Becoming Dad" refleja todos estos temas, y ayudar a llevar estas conversaciones a la corriente principal y destacar las experiencias de los padres es un gran privilegio.

Noviembre, Movember y el Día Internacional del Hombre son la oportunidad perfecta para que todos continuemos la conversación y pensemos en lo que podemos hacer para apoyar a los nuevos padres y crear un mundo mejor para todos nosotros.