'Yo voto a Kamala, mi marido vota a Trump': cómo las elecciones en EE UU están dividiendo a las parejas
Es un soleado domingo de octubre, tres semanas antes de las elecciones estadounidenses, y Corinne, Josh y sus dos hijas pequeñas se dirigen a un evento familiar en las afueras de Filadelfia, Pensilvania. Mientras pasan junto a una hilera de carteles a favor de Donald Trump, Corinne empieza a leerlos en voz alta con sarcasmo. Mira Josh, dicen que no te tiene que gustar Trump para votarle", se burla la profesora de 35 años. Lo entiendo", responde Josh. 'Ahora estoy de tu lado'.
Josh, contratista de 39 años, no siempre había pensado votar a los demócratas. Está inscrito como republicano. Pero a medida que se acercan las elecciones, Corinne le ha parecido convincente y ha cambiado de bando. Desprecia el "enfoque del odio ante todo" de Trump pero, en última instancia, es la anulación del caso Roe contra Wade, que protegía el derecho al aborto, lo que significa que nunca podría votar por él.
©Grazia En 2022, los jueces del Tribunal Supremo nombrados por Trump votaron a favor de acabar con el derecho al aborto, lo que significa que ahora los Estados pueden prohibirlo o restringir su acceso. Trump se atribuye el mérito y se ha convertido en uno de los temas electorales más candentes. Es lo que muchos piensan que está contribuyendo a una división de género mayor que nunca.
Yo voto laborista, mi novio podría votar reformista: eso limita nuestras conversaciones": Conozca a las parejas que votan diferente Todavía no se ha detectado ningún caso de Omicron en EE.UU., pero la variante preocupante está destinada a "llegar a todas partes", dice Fauci
Todas las encuestas cuentan la misma historia: con su mensaje a favor del aborto, Kamala Harris gana entre las mujeres, mientras que Trump gana entre los hombres. Las encuestas sugieren que la brecha de género es incluso mayor que cuando Trump se enfrentó a Hillary Clinton en 2016. La brecha de género parece que podría estar en los esteroides", dice la encuestadora demócrata independiente Celinda Lake en el podcast Political Scene de The New Yorker, explicando que el tema del aborto "realmente ha encendido a las mujeres".
Este es sin duda el caso de Pensilvania, el estado indeciso que, según los expertos, probablemente decida las elecciones. He llegado a ver cómo la división de sexos afecta a las relaciones y se manifiesta en los hogares. Nuestras conversaciones políticas son probablemente unilaterales cuando me excito", dice Corinne. Hizo que Josh viera el debate de septiembre entre Harris y Trump, lo que le ayudó a convencerse. Josh dice que Trump no coincide con sus valores.
Estaban en Irlanda cuando se anuló el caso Roe contra Wade. Estaba enloqueciendo. Despotricaba, enviaba mensajes a mis amigos, publicaba en las redes sociales. En ese momento Josh dijo: "No estoy de acuerdo con el aborto. ¿Podemos disfrutar del viaje?". Desde entonces, he pasado dos años insistiendo en lo importante que es ese tema. Ves otras partes del mundo y nunca quieres que sea así aquí, con los talibanes quitando derechos a las mujeres. Todo empieza con uno. Le digo a Josh que, aunque no le afecte personalmente, debe pensar en cómo afecta a otra persona".
Estas elecciones no sólo se han convertido en una batalla de sexos, sino que han dividido a maridos y mujeres. Por cada marido "persuasible", como Josh, hay mujeres que por primera vez votarán de forma diferente a sus maridos, que navegan con delicadeza por las conversaciones políticas porque no hay forma civilizada de discutirlas. Históricamente, las mujeres blancas casadas han votado en línea con su cónyuge. Pero a medida que cada generación de mujeres se hace más independiente económicamente y recibe más educación, parece que están tomando sus propias decisiones políticas, lo que significa que cada vez son menos las esposas que siguen la línea del partido de su marido.
Estas serán las primeras elecciones en las que Onita Maison-Luisi, estilista de 62 años, no ha votado lo mismo que su marido republicano, James Luisi, de 68 años. Discuten acaloradamente sobre todo, desde la compra de un coche hasta cómo criar a su hija [ahora de 34 años], pero la política se ha convertido en una línea roja que no cruzan. Onita ya ha perdido a un buen amigo porque sus maridos se pelearon por política; ella ha visto lo que puede pasar, así que no intenta hacer cambiar de opinión a James.
©Grazia "Antes de Trump, votaba más o menos a quien votara mi marido", dice Onita, que está de visita en Pensilvania desde la vecina Nueva Jersey, donde viven. En 2016, voté a Trump porque James presentó un buen caso. Pero no puedo respaldar a alguien que quiere hacer retroceder un paso los derechos de las mujeres', dice. Mi hija está en edad fértil y se niega en redondo a ir a un Estado en el que no haya servicios de aborto a su disposición. Probablemente muchas mujeres piensen lo mismo".
Por esta razón, Onita cree que en estas elecciones votarán más mujeres y que Harris arrasará. (Actualmente, las encuestas indican que Harris tiene una ventaja marginal, pero muchos temen que no se pueda confiar en las encuestas). Las mujeres son mucho más francas ahora. En mi época no lo hacíamos, pero ahora ya no lo toleran", afirma.
James dice que vota a Trump porque no está contento con la postura de los demócratas sobre el gasto y la inmigración. Qué opina de la desesperación de su mujer ante las opiniones de Trump sobre las mujeres? 'EEUU no será fuerte ni económica ni militarmente por el aborto. Es inmaterial y no tiene nada que ver con nada que sea realmente importante', dice. ¿Y si la salud de su hija estuviera en peligro a menos que pudiera acceder a un aborto? 'Te vas al estado donde puedes abortar', dice. En varios estados, las mujeres embarazadas tienen que recorrer largas distancias en condiciones de emergencia, y en algunos estados incluso se han propuesto prohibiciones de viajar para abortar.
Onita y James han acordado no estar de acuerdo, pero en algunas relaciones la brecha de género está separando a las parejas, ya que las mujeres eligen la política en lugar de la pareja...
Hace tres meses, Maisha Moosa, una influencer de belleza de 21 años que trabaja en marketing en Filadelfia, rompió con su novio de seis años tras enterarse de que pensaba votar a Trump. Maisha no había hablado mucho de política con su ex hasta que las redes sociales empezaron a inundarse de mensajes políticos a medida que se acercaban las elecciones. Primero me di cuenta de que no cuestionaba a sus amigos cuando expresaban opiniones contrarias al aborto. Cuando le pedía que no hablara así de un tema delicado que afecta al cuerpo de una mujer, ponía excusas y decía que sus amigos "no se equivocan"", cuenta. Intentaba explicarle por qué era importante, pero se reía o se iba a dormir al sofá. Había noches en las que me iba a la cama llorando. Me daba mucha rabia que mi propio novio fuera así y yo no pudiera hacer nada".
©Grazia Maisha no se atrevió a confesarle que va a votar a Harris. Habría habido una discusión y él habría intentado convencerme de que estoy loca", dice.
Su ex tiene 23 años. La brecha de género es particularmente pronunciada para la Generación Z, con hombres menores de 30 años mucho más propensos a votar por Trump que las mujeres menores de 30 años. Algunos hombres jóvenes se sienten relegados por el cambio en los roles de género, que les ha llevado a inclinarse por el personaje "machista" que le gusta representar a Trump. ¿De dónde cree Maisha que surgió esta faceta de su ex? Creo que estaba absolutamente influenciado por la forma en que Trump y otros [en las redes sociales] menosprecian o hablan de las mujeres de forma despectiva", dice.
El distanciamiento entre Maisha y su ex fue creciendo y la relación se rompió: la decisión de él de votar a Trump fue una de las cuestiones que los separó. Siento alivio de que ahora esté fuera de mi vida". Si buscara una nueva pareja, "querría saber cuál es su postura en este tema mucho antes en la relación", afirma.
Ambas campañas presidenciales han jugado con los grupos que las apoyan: Harris abrazó el verano Brat, apareció en el podcast Call Her Daddy de Alex Cooper e hizo una portada para US Vogue. (Su apoyo a Taylor Swift también es un detalle a tener en cuenta). Mientras tanto, Trump ha abrazado la manósfera, donde la misoginia está muy extendida. A mediados de octubre, su campaña trató de abordar su problema con las mujeres y Trump celebró un ayuntamiento con un público exclusivamente femenino, en el que insinuó que la prohibición del aborto podría revertirse.
Sofía Abbruzzesi, estudiante de 22 años, y su novio Stuart Gruters, de 24, que trabaja en ventas, han descubierto que están enzarzados en una discusión recurrente en la que ella intenta convencerle de que vote a Harris. Están de acuerdo en los derechos reproductivos y en el peligro que supondría otra presidencia de Trump, pero Stuart se siente desilusionado por los dos partidos principales y quiere encontrar una alternativa o abstenerse. Sofía intenta des- peradamente persuadirle de que no desperdicie un voto. 'Le estás quitando un voto a alguien que realmente podría hacer un cambio en el país', le dice.
©Grazia A medida que se agudiza la brecha de género, surgen organizaciones que intentan despolarizar Estados Unidos. Braver Angels organiza talleres para ayudar a quienes discrepan políticamente a relacionarse entre sí. Su coordinador en el estado de Pensilvania, Bill Madway, me cuenta que en un taller reciente le preguntó a un hombre por qué estaba allí. Dijo que intentaba salvar su matrimonio; él y su mujer estaban muy divididos por sus opiniones políticas opuestas", explica Madway. Tendemos a pensar en el daño que causa la polarización en el contexto de la política y el Gobierno", añade. La verdad es que a menudo nos toca más de cerca".
Entre las mujeres de Pensilvania, la rabia por la sentencia sobre el aborto es palpable y el apoyo a Harris urgente. El fuego se ha encendido y las mujeres se han movilizado. Ahora les toca a los hombres decidir si están preparados para su primera mujer Presidenta. ¿Podrán convencerles las esposas de Kamala? ¿Llegará Harris a los hombres antes de que más de ellos se decanten por Trump? El 5 de noviembre lo sabremos, y nos afectará a todos.
