¿Cómo saber si tengo baja autoestima?

¿Crees que podrías tener problemas de autoestima y de confianza en ti misma? Consulta estos síntomas para saber si tienes baja autoestima y empezar a resolver este problema.

Quererse y respetarse a uno mismo es el primer paso para conseguir que nuestras relaciones sociales, laborales y amorosas funcionen. A veces, cuando al va mal con nuestros seres queridos, puede que el problema radique en nuestra falta de confianza.

¿Cómo saber si tengo un problema de baja autoestima?

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Quizás no te hayas dado cuenta de que tu autoestima es demasiado baja y por eso hay ciertas cosas que no funcionan en tu vida. Estos son algunos de los síntomas de las personas con poca autoestima.

No tienes ambición por nada. La falta de confianza en uno mismo puede provocar que todo nos de igual. Lo que hagamos o lo que consigamos para a no importarnos nada y se genera una falta de ambición. Esta falta de ambición no aparece porque estemos conformes con lo que tenemos en nuestra vida. Las personas con baja autoestima tampoco suelen estar satisfechas con lo que tienen. En cambio, cuando ocurre todo lo contrario también puede significar que una persona tiene baja autoestima. Es decir, si tus ambiciones son desmesuradas y demasiado exigentes, podrías tener el mismo problema. Esto ocurre cuando tratamos de compensar nuestra falta de autoestima con grandes logros o con objetos materiales que nos obsesionamos por conseguir.

Eres irresponsable. Las personas que tienen poca confianza en sí mismas se vuelven irresponsables, no cumplen lo que deben hacer, llegan tarde... Esto ocurre porque, cuando no confías en ti, no te esfuerzas porque los demás lo hagan, por lo tanto no necesitas demostrar ni cumplir nada. Si no eres capaz de cumplir aquellas cosas que los demás esperan de ti, podrías tener un problema de autoestima.

No te propones nuevos retos. Tu falta de confianza te llevará a pensar que no vale la pena intentar nada nuevo, ya que piensas que no lo vas a conseguir. Por este motivo, las personas con baja autoestima dejan de proponerse nuevos retos.

Has dejado de discutir. Cuando no confías en ti mismo ni siquiera confías en tener razón o en haber dicho lo correcto. Estas personas ceden en las discusiones. Cuando tienen la posibilidad de discutir y mostrar su argumento, prefieren callar. Ni siquiera ellos mismos están seguros de llevar razón.

Eres negativo y pesimista. Ser pesimista en cuanto a tus capacidades hará que empieces a ver la vida de una forma más negativa. Comenzarás a pensar que todo te va a salir mal porque, si puede salir mal, ¿por qué iba a salir bien? Este argumento es muy negativo a la hora de tomar decisiones en nuestro día a día, ya que no te atreverás a dar grandes pasos ni a realizar cambios importantes.

Ya no te cuidas. Cuando has dejado de cuidarte por tu baja autoestima puede llegar a convertirse en un problema, ya que, si no te ves bien, esto alimentará aún más la falta de confianza en ti misma. Si dejas de peinarte, comprarte ropa nueva, arreglarte de vez en cuando, incluso descuidas tu higiene, empieza a reforzar tu autoestima. De lo contrario, esta situación podría dar lugar a una depresión.

Eres tímido y te cuesta estar con gente. Cuando una persona se muestra demasiado tímida puede significar que hay un problema de autoestima detrás que no lo deja sentirse seguro frente a un grupo de personas. Estas personas sienten miedo a las represalias por decir algo mal o por no llevar razón. En su cabeza piensan que nadie quiere estar con ellos, por eso no se sienten bien en grupo. En definitiva, acaban sintiendo un miedo a enfrentarse a estas situaciones que hace que se vean desde fuera como personas muy introvertidas.

Eres dependiente de otras personas. El miedo a quedarse solos porque nadie quiere estar con ellos les hace desarrollar relaciones muy dependientes con sus amigos o sus parejas. Necesitan continuamente la aprobación de las personas que están cerca y siempre buscan a alguien más fuerte para que los cobije.

Siempre estás a la defensiva. Si tenemos una falta de autoestima tenderemos a pensar que somos personas que no merecen la pena o que no valen para nada y, por lo tanto, creeremos que los demás también piensan lo mismo de nosotros. Esto nos hará estar siempre a la defensiva ya que pensaremos que la persona que nos está hablando está criticándonos o se está riendo de nosotros.

No has marcado un rumbo en tu vida. Estas personas no saben dirigir su vida ya que nunca están seguro de sus decisiones. Esto hace que se dejen llevar por otras personas más fuertes que pueden ayudarlos, pero que también pueden manipularlos y llevarlos por un camino que no les conviene.

Si te has visto reflejada en estos puntos en algunos de ellos, podrías estar teniendo un problema de autoestima y lo mejor es que lo soluciones cuanto antes. La falta de autoestima da lugar a situaciones como no poder controlar los celos, intentar espiar a nuestra pareja porque pensamos que se irá con alguien mejor que nosotros en cualquier momento, o no poder conseguir lo que queremos en nuestra carrera laboral. 

Por todos estos motivos, si has descubierto al leer esto que tienes baja autoestima, deberías ponerte cuanto antes a realizar algunos ejercicios para aumentar tu autoestima y recuperar la confianza. Si loves necesario, también puedes ponerte en manos de un profesional que te guíe.