Qué hacer si tienes baja autoestima
Qué hacer si tienes baja autoestima. Imagínate en qué mundo tan horrible viviríamos si todos tuviéramos la autoestima alta y pensáramos que somos perfectas… ¡Qué horror!
¿Quién podría sobrevivir en un mundo así? Lo más normal, sin embargo, es tener pensamientos negativos cada vez que nos miramos al espejo exterior o interior. En realidad, incluso las mujeres más fuertes se levantan a menudo tristes, sin ganas de nada (ni siquiera de pedirle a la asistenta que tienen contratada 24 horas al día que les prepare el desayuno) y con la terrible sensación de que su vida es un fracaso total. En cambio, hay otras mujeres que trabajan veinte horas al día y que no llegan a fin de mes que son más felices y tienen la autoestima más alta. ¿Por qué será? Porque estas últimas son listas y saben qué hacer si tienes baja autoestima.
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Tener la autoestima baja te impide disfrutar del día a día, así que lo más importante es que te des cuenta que es tu baja autoestima (y no la vida) la que te impide disfrutar. Puesto que no puedes eliminar la baja autoestima de tu mente como eliminas un fichero de tu ordenador (enviándolo a la Papelera de Reciclaje conservando la posibilidad de recuperarlo en caso de que lo necesites en un futuro) sino que, para eliminar la baja autoestima, tienes que resetear el equipo por completo. A continuación, te indicamos los pasos que debes seguir para conseguirlo:
Tienes que ir entendiendo las definiciones. La autoestima, recuerda, es la opinión que tenemos de nosotras mismas. Cuando tienes la autoestima baja, entonces, tienes pensamientos negativos sobre ti misma y te cuesta afrontar las dificultades de la vida. Puede que te ahogues en un vaso de agua si crees que no sabes remar, aunque en realidad no haga falta saber remar para no ahogarse en un vaso de agua.
Piensa qué podrías mejorar para tener la autoestima más alta. Es importante que seas capaz de identificar qué te falla en la vida (o en la visión que tienes de la vida) para poder corregirlo. La meditación puede ayudarte a descubrirlo y aprender a distinguir entre pensamientos e ideas y hechos: a menudo, las cuestiones que más nos preocupan habitan en el sótano de nuestra mente, son totalmente irreales y no tienen ninguna consecuencia en la vida real.
Respecto a los demás, olvídate de comparar tu vida con la de otras personas que, consideras, han triunfado más en la vida. Probablemente nacieran con más privilegios que tú (Donald Trump, por ejemplo, recibió su primer millón de euros gracias a un pequeño préstamo que le concedió su padre). Si no empiezas la partida con las mismas cartas, es imposible que ganes. Así que no te compares.
No te compares con actrices, cantantes y modelos famosas. Recuerda que si la muñeca Barbie fuera de carne y hueso, no podría sostenerse de pie. Proporcionalmente, sería una mujer de 1,82 metros de altura con una talla de sujetador 95, una pequeña cintura de 45 cm y unas caderas de 83 cm. No hace falta que te midas a ti misma para comprobar que estas medidas son irreales.
Piensa en ti misma y en tu entorno. Resérvate unos momentos al día para apreciar las cosas buenas de la vida que te ha tocado vivir. Si sigues pensando que todo lo que te rodea es terrible y que tu vida es peor que la de las personas que te rodean, puedes probar a sentarte en el sofá de tu casa con tu portátil con conexión a internet veloz y, mientras esperas a que te llegue la comida a domicilio que has encargado y por la que pagarán medio euro al repartidor, puedes darte una vuelta por Internet y buscar noticias relacionadas con las Crisis de refugiados, víctimas de guerra o el Barco Aquarius: verás noticias de gente que daría la vida por tener una milésima parte de los privilegios que tú tienes. Si esto te parece demasiado, si no quieres ver historias de mujeres que no tienen más ambición que escapar de la violencia de la guerra sin que las torturen demasiado o las maten, puedes realizar una donación a través de Facebook a la protectora de gatitos abandonados que más te interese.
En realidad, lo mejor que puedes hacer si tienes baja autoestima es lo siguiente:
Practica deporte. Cuídate por dentro y por fuera, apúntate a un gimnasio y asiste a todas las clases que puedas. Practica spinning un par de veces por semana, ve a clases de yoga, métete en la clase de zumba, tírate a la piscina a nadar veinte largos. Y si solamente puedes nadar uno o dos el primer día, ya podrás nadar tres o cuatro largos al día siguiente. Cada vez que vayas a nadar, podrás nadar mejor y saldrás antes a flote. Procura comer bien, siempre alimentos saludables e incluye siempre por lo menos 5 piezas de fruta o verdura al día. Puede sonar aburrido cenar un salteado de verduras en vez de una pizza pero es probable que la pizza carbonara con doble ración de bacon y de tamaño familiar que te cenas cuando estás sola en casa y sientes asco por tu vida sea la principal causa de tus males. Trata de salir más a menudo pero procura alejarte del alcohol en exceso: puedes tomar una cerveza o dos, pero no te emborraches. Trata de dormir bien, introduce en tu vida rituales de higiene del sueño, esto es, una serie de hábitos que te ayudarán a dormir mejor.
Recuerda que si comes y duermes bien, la rueda de la vida girará bien, todo irá mejor y no tendrás que preguntarte nunca más qué hacer si tienes baja autoestima.
