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Cómo encontrar la afición de tus sueños

¿QUÉ ME GUSTA?

Todo el mundo debería pasar tiempo disfrutando de un hobby. A menudo nos encontramos con que llenamos nuestras agendas con impresionantes actividades extracurriculares para las solicitudes universitarias. Pero esto hace que sea difícil descubrir realmente lo que nos apasiona.

Haciendo las cosas sólo por el Y-O-U, puedes encontrar con éxito *esa* afición que siempre has anhelado. Echa un vistazo a estas cinco maneras de ayudarte a descubrir por fin la afición de tus sueños.

1. ¡Pruébalo, chica!

No te aconsejamos que salgas y pruebes todas las aficiones imaginables (eso sólo te dejará con un desagradable caso de agotamiento), pero si hay algo que te interesa aunque sea un poco, ve a por ello, chica. Tienes que probar las aficiones. Sal ahí fuera y prueba lo que te llame la atención.

2. Investiga

Si un pasatiempo te interesa, aunque sea remotamente, abre Google y haz una investigación. El pasatiempo de tus sueños tiene que encajar en tu horario y tu presupuesto, así que ten en cuenta esos factores durante tu sesión de recopilación de información. Mira en YouTube tutoriales sobre break dance, busca en Google los materiales que necesitarías para hacer ganchillo o haz un plan de ahorro para un par de patines.

3. Tiempo del diario

Haz una lista con viñetas bajo las siguientes indicaciones:

¿Qué me gusta?

Por ejemplo, leer artículos de GL, escuchar a T. Swift

¿En qué soy bueno?

Por ejemplo, hacer tableros estéticos en Pinterest, hacer lazos con los ojos

¿Qué podría hacer más?

Por ejemplo, mantener la calma en situaciones de estrés, limpiar mi habitación (ugh)

Este sencillo ejercicio te dará una idea más clara de lo que te apasiona y de lo que anhelas conseguir. Tómate un tiempo para reflexionar sobre este ejercicio en papel o para reflexionar en tu mente hasta que descubras exactamente qué afición se ajusta a tu horario, tu personalidad y tus pasiones.

4. ¿Qué es lo que te ha gustado a ti, Mini?

Otra forma de descubrir la afición de tus sueños es recordar lo que te gustaba hacer cuando eras niño. Pregunta a tus padres o a cualquier persona que te conociera de pequeño a qué dedicabas tu tiempo. Si te encantaba dibujar con tiza, experimenta con la pintura de grandes murales en lienzo. Si de niño siempre estabas al aire libre, busca aficiones que te lleven al exterior (como el senderismo, el patinaje o la jardinería).

5. Prepárate para el fracaso

Probar nuevas aficiones puede parecer desalentador. Hay que ser realista: Al intentar cosas nuevas, siempre habrá momentos de fracaso. Pero tienes que seguir el proceso. Los errores no son siempre tan horribles: son los que te ayudan a aprender y mejorar al final del día. Lo has conseguido.

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