Cómo inducir el parto de forma segura y qué métodos naturales están respaldados por la ciencia

Para el 10% de las mujeres que no han dado a luz en la semana 42, inducir el parto puede ser una opción viable. De hecho, dependiendo de tu salud y de la salud del embarazo, los médicos pueden optar por inducir el parto en cualquier momento después de las 39 semanas.

Las mujeres deben hablar primero con un médico, quien decidirá si inducir el parto es lo más seguro. "Siempre se trata de sopesar los riesgos y los beneficios para la madre y el bebé", dice la doctora Lyndsey Harper, ginecóloga-obstetra hospitalaria de Baylor Scott & White Health. Esto es lo que debe saber sobre cómo funciona la inducción del parto y cuándo los médicos pueden recomendarla.

Para poder dar a luz, el cuello del útero de la mujer debe ablandarse para que sea lo suficientemente flexible como para estirarse y permitir el paso del bebé. Este proceso se denomina maduración del cuello uterino y es uno de los dos pasos que realizan los médicos para inducir el parto. El segundo paso es iniciar las contracciones del parto.

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Para ablandar el cuello uterino, los médicos utilizarán un dispositivo, como un tipo de catéter. También considerarán el uso de medicamentos, como el misoprostol oral, para inducir las contracciones.

"Depende del punto de partida", dice Harper. "En mi consulta, solemos utilizar una combinación de estos dos métodos".

Es posible que hayas oído hablar de métodos "naturales" para inducir el parto, como los compuestos de hierbas, los baños calientes, la acupuntura y las relaciones sexuales. Sin embargo, pocos de estos remedios caseros están respaldados por la ciencia, dice Harper.

De hecho, algunos de estos métodos pueden ser peligrosos, y los médicos desaconsejan remedios más arriesgados como el aceite de ricino o el aceite de onagra.

Sin embargo, una opción de bajo riesgo es la estimulación del pezón. Los investigadores han descubierto que este método puede ayudar a inducir el parto mediante la liberación de oxitocina, que es la hormona clave que interviene en las contracciones del parto.

Pero antes de probar cualquier técnica de inducción casera, las mujeres deben consultar a su médico.

"A veces es más seguro inducir el parto que estar embarazada", dice Harper. "Hay muchas situaciones médicas diferentes que requieren la inducción del parto".

En el caso de un embarazo tardío -entre 41 y 42 semanas- o postérmino -más de 42 semanas-, se suele recomendar la inducción del parto para compensar el mayor riesgo de complicaciones, como la muerte del feto, una infección en el útero o un desgarro vaginal grave durante el parto, dice Harper.

Por el contrario, existen riesgos para la salud si se induce demasiado pronto. Cuando se induce el parto entre las semanas 36 y 38, Harper afirma que la complicación más frecuente son los problemas respiratorios del bebé.

Los médicos también inducirán el parto a petición de la madre si está de más de 39 semanas, y si es seguro y apropiado.

Por el contrario, es probable que el médico se niegue a inducir el parto a una mujer que no haya alcanzado al menos las 39 semanas y no tenga motivos de salud para hacerlo, dice Harper. En su lugar, el médico puede animar a la madre a esperar.

En última instancia, cada embarazo es diferente, lo que significa que no hay un momento adecuado para inducir el parto para todo el mundo.

"Se trata de una recomendación muy individualizada que incluye la seguridad médica del embarazo con las preferencias de la paciente", dice Harper. "Los datos apoyan que entre las 39 semanas y las 40 semanas y media es el momento idóneo para ponerse de parto o ser inducido", dice Harper.

Antes de inducir el parto, debes hablar primero con un médico para que te oriente. Si decides dar a luz en un hospital, el médico utilizará medicamentos o un dispositivo similar a un catéter para inducir el parto. Debes evitar las opciones naturales arriesgadas y no probadas para inducir el parto, como el aceite de ricino y la acupuntura. La única opción natural que puede funcionar es la estimulación del pezón.