Consejos para vivir sola y feliz
Consejos para vivir sola: cómo disfrutar de tu independencia viviendo sola y feliz.
¿Has dado el paso de independizarte y estás un poco asustada? ¿Después de años de vivir en pareja te ha tocado vivir sola? Esto puede suponer todo un reto para muchas personas que tienen que vivir solas por primera vez. Mientras que algunas personas independientes saben disfrutar de su espacio y de su soledad, otras se sienten perdidas y piensan que la soledad es un fracaso y no una elección.
Un estudio publicado en BMC Public Heath, concluyó que las personas que viven solas tienen un 80% más de posibilidades de sufrir depresión. Sin embargo, vivir solo también tiene muchas ventajas que algunas personas descubren con el paso del tiempo.
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En este artículo queremos darte algunos consejos para que puedas ser más feliz viviendo sola y que además, lo hagas de una forma ordenada, práctica y segura.
Conócete a ti misma. Cuando empiezas a vivir sola te encuentras con muchos momentos para dedicarte a ti misma de los que antes no disponías. Dedícalos a pensar, a escribir sobre tus sentimientos o a realizar actividades que nunca antes habías hecho. Todas estas cosas te ayudarán a conocerte a ti misma en profundidad y a disfrutar de los momentos a solas contigo misma. Cuantos más momentos dediques a ti misma, más ventajas encontrarás a vivir sola. Además, dejarás de ver la 'soledad' como algo negativo o relacionado con el fracaso.
Aprende cada día. Vivir sola te da la posibilidad de aprender cada día a solucionar pequeños problemas sin miedo a equivocarte. Cambia una bombilla, arregla esa estantería o esa lámpara de se cayó. Busca información en internet sobre cómo hacerlo, sentirte útil y resolutiva te hará sentir bien contigo misma.
Adopta a una mascota. Un perro o un gato puede ser la compañía perfecta para una persona que vive sola por primera vez. Los animales te ofrecen compañía a diario y también suponen una distracción extra para ti que evitará que, en los momentos de soledad en los que no tienes nada que hacer, haya algo a lo que prestarle atención. Eso sí, asegúrate de tener el lugar adecuado para una mascota y el tiempo suficiente para cuidarlo como se merece.
Mantén el contacto con tus amigos. Que vivamos solas no quiere decir que tengamos que estar aisladas. Quizás las redes sociales o el móvil puedan serte muy útiles en momentos de debilidad, ya que podrás recurrir a tus amigos cuando no tengas nadie con quien hablar al volver enfadada y cansada del trabajo.
No le quites importancia a la cocina. Cuando empezamos a vivir solas, sobre todo si antes hemos vivido en pareja o con más gente, cocinar para uno empieza a dar mucha pereza. Esto nos puede llevar a comer mal y de forma desordenada, así que tienes que evitar que esto ocurra. Aprende a cocinar buenos platos solo para uno, te servirán de práctica para cuando quieras invitar a tus amigos a cenar. Además, puedes probar todas las recetas que te apetezcan ya que solo tienes que tener en cuenta tus gustos. ¡Y nadie se va a quejar del resultado!
Mantén la disciplina. Es cierto que cuando vivimos solos nadie nos dice lo que tenemos que hacer, pero si quieres mantener una vida ordenada y una casa en buen estado, es importante que practiques la autodisciplina. Sigue unos horarios a la hora de irte a dormir, de levantarte o de sentarte a comer. Mantén la casa ordenada a diario y fija un día a la semana para realizar una limpieza de toda la casa. Aunque nadie te obligue a ello, será mucho más agradable para ti vivir sola si el entorno es un lugar en el que te gusta estar.
Ten un botiquín. Si te pones enferma, nadie podrá bajar a la farmacia a traerte medicinas y probablemente a ti no te apetezca nada hacerlo. Por eso, es más importante que nunca que tengamos en casa un botiquín con las medicinas básicas para encontrarnos bien.
Conoce a tus vecinos. Saluda a tus vecinos y preocúpate por conocerlos y mantener algo de contacto con ellos. Saber quién es la gente que te rodea te hará sentirte más segura en tu casa y también lo hará el saber que puedes llamar a alguno de ellos en caso de emergencia.
Decora la casa a tu gusto. Llena la casa de detalles y cosas que te gusten. Coloca los muebles y los objetos de la forma en la que te hagan sentir mejor, aunque tengas que cambiarlo todo varias veces de sitio hasta encontrar la forma adecuada. Vivir en un lugar que se adecua a tus gustos y preferencias te hará sentirte más feliz en ese sitio. Si descuidas la decoración y el orden, es más probable que te sientas incómoda o triste sin saber por qué.
Disfruta. Después de un tiempo viviendo sola, los momentos en los que estén en casa sin ninguna obligación y con tiempo libre, empezarán a ser un momento perfecto para disfrutar de la casa y de tus aficiones, y no para ponerte a pensar en tu propia soledad. Piensa en las ventajas de vivir sola y disfruta de tu libertad.
Si no vivir en pareja o en familia te hace sentir triste, mira estos consejos para vivir sola y empieza a disfrutar de tu independencia y de tu libertad.
