Estos médicos están haciendo que los trasplantes de pelo sean más accesibles para los pacientes negros

No era la primera vez que este ghanés-panameño nacido en Nueva York luchaba contra problemas capilares críticos. Cuando era adolescente, Frempong sufría de alopecia por tracción. Por aquel entonces, su madre trató de remediarlo visitando varios salones de belleza e intentando numerosas soluciones que finalmente no supusieron una diferencia significativa.

"Mientras siguiéramos teniendo los mismos comportamientos perjudiciales", dice, "era una batalla perdida".

Según Frempong, el daño que sufría su cabello no era fácilmente aparente a simple vista porque "camuflaba el problema" a través de determinados peinados que lucía cuando su cabello estaba relajado. Pero con la decisión de optar por la naturalidad, eso ya no era una opción. Por ello, acudió al Dr. Achiamah Osei-Tutu, un destacado dermatólogo de la ciudad de Nueva York especializado en trastornos de la caída del cabello y su restauración.

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"Empezamos con terapias conservadoras como inyecciones de esteroides y Rogaine", dice Frempong. "La mejoría era tan marginal que realmente no era lo suficientemente eficaz para mí, así que en ese momento, [el Dr. Osei-Tutu] me ofreció el trasplante capilar".

Los datos anecdóticos de las entrevistas con dermatólogos negros sugieren que un número significativo de personas negras -en particular, mujeres negras- buscan principalmente atención dermatológica para la pérdida de cabello, mientras que los datos de un estudio de 2014 sitúan la cifra de mujeres negras que informan de la pérdida excesiva de cabello en más del 50%.

"La alopecia por tracción, que es aquella en la que se pierde la línea frontal, existe en una de cada tres mujeres negras adultas", dice la doctora Meena Singh, dermatóloga certificada con sede en Kansas City, Kansas.

Para la Dra. Singh, que decidió dedicarse a la dermatología por la escasez de personas negras en la especialidad (sólo un 3% de los dermatólogos de Estados Unidos son negros), cree que la representación es pertinente para la atención que se recibe.

"Es un campo en el que el color de la piel y la etnia importan de verdad", dice, "si tienes la piel de color o eres afrodescendiente, puedes manifestar condiciones diferentes. Puede que tengamos que tratarte de forma completamente diferente, y si te tratamos con las terapias equivocadas, entonces sí que podemos hacer daño."

Según el Dr. Christian Bisanga, un destacado especialista belga en el tratamiento de la caída del cabello y la cirugía de trasplante capilar, sólo una pequeña proporción de médicos puede realizar trasplantes capilares con textura afro como el Dr. Singh y el Dr. Osei-Tutu. De hecho, calcula que hay menos de 50 dermatólogos en todo el mundo que puedan realizar un trasplante de pelo con textura afro "al más alto nivel" El Dr. Basinga afirma que existen diferencias estéticas en la forma de la cabeza y el diseño de la línea del cabello entre las personas con ascendencia africana y las de ascendencia europea y asiática. Las personas con pelo de textura africana también tienden a tener el pelo más rizado y grueso, y si no se conoce bien esto, puede afectar al trasplante en cuanto a la forma de transferir los folículos y, si se hace de forma incorrecta, aumentar la posibilidad de una reacción de hiperpigmentación.

Originario de la República Democrática del Congo, el Dr. Bisanga completó sus estudios de medicina en Bélgica, pero su interés por la caída del cabello comenzó cuando vivió en Atlanta, Georgia, durante sus estudios de posgrado.

"Me abrió los ojos porque vi muchas tragedias por el uso de alisadores. A nivel personal, hay mucha vergüenza y la gente no se pone a hablar de la caída del cabello. Especialmente con todos los tejidos y todas las extensiones y todo lo demás, ya sabes, las pelucas que la gente puede ponerse y ocultar lo que ocurre debajo."

Según el Dr. Bisanga, hay dos técnicas principales que se utilizan en los trasplantes de pelo de alta textura: la técnica de la tira y la extracción de unidades foliculares. En la primera, el dermatólogo disecciona los folículos bajo el microscopio tras extraerlos de la piel de la parte posterior de la cabeza. En la segunda, el dermatólogo toma los pelos uno a uno de la llamada zona donante y los traslada a la zona receptora. El Dr. Bisanga es especialmente partidario de este último método porque no puede dejar cicatrices. Pero no todas las personas que sufren pérdida de cabello son candidatas a estos procedimientos.

"A veces la gente tiene lo que llamamos alopecia cicatricial", dice, "los que sufren [ese tipo de pérdida de cabello] no siempre son buenos candidatos al trasplante capilar, a menos que [su alopecia] haya sido tratada durante al menos dos años" (según el Dr. Bisanga, el tratamiento suele consistir en una combinación de esteroides, antibióticos y antiandrógenos; una vez que no hay signos de una posible inflamación, se puede realizar un trasplante, pero siempre existe el riesgo de que se produzcan reagudizaciones, por lo que los pacientes deberán ser controlados por su dermatólogo).

El Dr. Bisanga, que es dermatólogo desde hace 20 años, dice que en los últimos cinco años ha observado un lento pero creciente interés colectivo en la profesión por ampliar las soluciones y los conocimientos para los afrodescendientes que sufren pérdida de cabello. Ha liderado la creación de una red mundial que incluye a dermatólogos, cirujanos plásticos, médicos especialistas en trasplantes capilares y médicos estéticos, para compartir recursos y conocimientos. Uno de sus esfuerzos consistió en cofundar un retiro sobre trasplantes capilares con textura afro - "el primer evento sobre trasplantes capilares dedicado exclusivamente a los cabellos afro", dice el Dr. Bisanga- en Mauricio en octubre del año pasado, donde, junto con un colega, el Dr. Bisanga formó a los dermatólogos asistentes en los entresijos de los trasplantes capilares con textura afro, entre otras cosas en una clase magistral.

"Fueron cuatro días. Intensos", dice, describiendo largos periodos de 12 horas. "Hablamos sobre el cabello, pero también sobre la cirugía y les mostramos cómo hacerlo correctamente".

Frempong, que se sometió a la técnica de la tira en 2015 dijo que estaba preocupada por la zona donante, que tiene que ser afeitada, pero dice que "realmente resultó no ser un gran problema en absoluto."

También le preocupaba saber si sería capaz de cuidar su cabello natural después del procedimiento. Una vez más, Frempong fue presa de los consejos de Internet, que pueden funcionar con algunos cabellos pero no con el suyo.

"Hay mucha gente por ahí que son, entre comillas, 'influencers', pero no son expertos, ¿verdad?", dice. "Están dando información basada en lo que funciona para ellos o su textura de cabello, pero no está [necesariamente] basada en ninguna ciencia o hechos. Es sólo su experiencia".

Frempong comenzó un nuevo viaje capilar en 2017 y, afortunadamente, incluso después de un gran corte, su trasplante no se vio afectado. Ahora recibe sus consejos capilares en línea de Black Curl Magic y su Instagram relacionado, ambos recomendados por el Dr. Osei-Tutu.

Para Frempong, cualquier persona que tenga los mismos problemas que ella debería acudir a un dermatólogo lo antes posible: "Si alguien tuviera exactamente lo mismo que yo, le diría: 'Dios mío, hazlo ayer'", afirma.

Esta historia forma parte de The Melanin Edit, una plataforma en la que Allure explorará todas las facetas de una vida rica en melanina, desde los tratamientos más innovadores para la hiperpigmentación hasta las realidades sociales y emocionales, todo ello mientras se difunde el orgullo negro.