Los mejores consejos para viajar
Se acerca el verano, se nota en el ambiente. Todas estamos de mejor humor aunque ya no tomemos postre, no retrasamos la cita para el laser y pasamos las horas muertas viendo colecciones de bikinis en las webs de nuestras tiendas favoritas. Sí, chichas, ¡se acercan las vacaciones! y nos huele el culo a playa.
Para muchas de nosotras esto también es motivo de estrés. Hemos pasado todo el año deseando que llegue este momento y queremos que todo salga a la perfección. Una buena planificación del viaje nos ayudará a sentirnos más relajadas y nos dará herramientas para enfrentarnos a cualquier inconveniente que pueda surgir durante las vacaciones.
Queremos empezar compartiendo contigo una frase que tenemos grabamos a fuego para cada vez que vamos a viajar, sea cual sea el sitio: “No viajes buscando monumentos, viaja en busca de momentos” Aunque pueda parecer obvio, en ocasiones queremos abarcar más de lo que el tiempo nos permite, nos pasa en la vida diaria y sucede igual durante las vacaciones. Por eso no hay que olvidar que estos días son para disfrutar y no para hacer un máster en la historia del arte de nuestro destino; lo pasaremos mejor si pasamos la tarde paseando o tomando un café en una bonita terraza que si nos empeñamos en recorrer los 20 museos que aparecen en el folleto de turismo. Relax.
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Independientemente de cuál sea tu destino, por aburrido que te pueda parecer a priori, todas las zonas tienen su encanto; así que no te frustres e investiga, seguro que algo te podrás llevar del lugar, ¡aunque sea la simpatía de sus gentes! Si en tu destino hablan otros idiomas que te son desconocidos, nunca está demás aprender unas pocas palabras, seguro que los lugareños te agradecen. Aunque si ves que es algo demasiado complicado, no lo dudes, una sonrisa es la mejor de acercarse a la gente; con tu sonrisa vencerás todas las barreras, ya sean idiomáticas, culturales o incluso religiosas.
Si tu destino es internacional, recuerda antes de salir que debes comprobar con tu compañía telefónica que tienes activado el roaming para poder llamar a tus amigas y contarles lo maravilloso que está siendo tu viaje. Si los precioso son desorbitados y ni siquiera puedes usar los datos, seguro que encuentras espacios donde conseguir wifi gratis, hoy en día suelen facilitarte señal en casi todas las cafeterías y hoteles. ¡Queremos ver tu cuenta de Instagram llenita de fotos!
Otra cosa a comprobar, es que tus tarjetas bancarias funcionan correctamente en el extranjero ya que algunas entidades bancarias las bloquean si ven operaciones en lugares extraños. Así que no está de más llamarles para confirmarles que vas a ser tú la que está sacando efectivo en un cajero de Tombuctú y no algún pirata informático que te ha robado los datos. En cuanto al dinero puede ser también conveniente llevar algunos billetes de la moneda local desde el inicio del viaje, así te pueden salvar si debes dar alguna propina al taxista que te acerque al hotel, por ejemplo. Unos dólares siempre te pueden ayudar en estas ocasiones, ¡los cogen en todas partes!
Llegamos a un tema peliagudo, pero hay que tratarlo y lo sabes, no podemos esquivarlo más: el equipaje. Todas queremos estar monísimas en nuestras vacaciones y sabemos que no hay nada más frustrante que querer ponerte una pieza de ropa y comprobar que te la has dejado en casa. Pero, amiga, el espacio en la maleta es limitado y al precio que se está poniendo facturar en algunas compañías aéreas, casi te sale más barato ir con lo puesto y comprarte unos cuantos modelitos al llegar a tu destino. Por eso antes de iniciar el horroroso proceso de escoger qué te llevas y de qué tendrás que prescindir, te recomendamos que hagas una lista detallada en la que escribas, de manera sincera, qué ropa es imprescindible para cada día. ¡No vale hacer trampas! Si aún así terminas con tu pobre maleta hinchada y con problemas de sobrepeso, te dejamos un truco: si enrollas la ropa en lugar de doblarla ocupará mucho menos espacio. ¡Ah! Y asegúrate que en tu hotel o apartamento cuentan con secadores para el pelo, planchas... todos los pequeños electrodomésticos que vas a necesitar y no debes llevarte contigo.
Y ya está bien de soñar con destinos increíbles, si, como nosotras, lo más lejos que va a poder ir este año es a fiestas del pueblo de tus padres, no desesperes. Siendo sinceras, ¿quién no disfruta con una buena verbena? ¿quién no se emociona cuando suena “Paquito el Chocolatero”? Nosotras sí, y seguro que tú también. Olvidémonos de las playas de arena blanca de Tailandia y centrémonos en lo bonita que es nuestra piscina municipal. Puede no parecer un destino tan glamuroso, pero, ¡qué narices! el glamour ya lo pones tú, que para eso llevas a plan todo el invierno. Sonríe y disfruta, que es época de diversión.
