Los mejores tratamientos estéticos para el acné
Tratamientos estéticos para el acné: cómo conseguir una piel más bonita.
El acné es una enfermedad inflamatoria de la piel muy común que afecta a un gran porcentaje de la población durante la adolescencia y que también puede reaparecer en la edad adulta, siendo esto segundo más común en las mujeres. Aunque no sea una enfermedad grave, el acné si puede tener un gran efecto psicológico ya que, cuando se trata de acné severo, puede mermar el autoestima de los que lo sufren y afecta a su vida social y a la forma en la que se relacionan con los demás. En los casos más extremos, y especialmente cuando aparece en la edad adulta, puede llegar a causar depresión.
¿Por qué aparece el acné?
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Hay muchos factores que influyen. El factor hereditario es uno de ellos, por lo que es bastante común que si nuestros padres han sufrido acné en la adolescencia nosotros también lo acabemos desarrollando. Otro factor de peso es el hormonal. Durante la adolescencia es cuando las hormonas están sufriendo más cambios, por eso es este momento en el que el acné es más fácil que aparezca. Por esta misma razón, el acné en adultos es más común en las mujeres, ya que son ellas las que siguen experimentando cambios hormonales a lo largo de su vida, en momentos como la menstruación, la ovulación o el embarazo.
La razón por la que las hormonas son tan determinantes en la aparición del acné es porque hacen que la producción de sebo aumente, y es el sebo el que obtura los poros de la piel haciendo que se acumule la suciedad y también que se produzcan pequeñas infecciones debido a las bacterias acummuladas.
El acné, un estigma
A pesar de ser la enfermedad de la piel más común, el acné sigue siendo visto como una especie de tabú o estigma, especialmente cuando aparece en mujeres adultas, momento en que se supone que su piel debe ser lisa, joven y bonita. Por esta razón, las mujeres que tienen acné pasada la adolescencia pueden llegar a desarrollar graves problemas de ansiedad, inseguridad y depresión, especialmente en casos en los que el acné es severo y aparecen quistes o infecciones que después pasan a convertirse en marcas en el rostro y cicatrices.
Por todo esto, son muchas las mujeres que recurren a tratamientos estéticos para el acné. Como hemos dicho, no se trata de una simple razón estética, si no de recuperar tu vida y la seguridad en ti misma para poder seguir avanzando hacia tus objetivos. Si estás en esta situación y quieres recurrir a un buen tratamiento, te contamos cuáles son los tratamientos estéticos más avanzados para acabar con el acné y sus marcas.
Terapia biofotónica. Es uno de los tratamientos estéticos para el acné más novedosos y eficaces ya que trata tanto el acné severo como las cicatrices. Conssite en combinar la emisión de luz LES de alta potencia con un gel biofotónico. El tratamiento resulta muy seguro y no tiene efectos secundarios, lo que lo convierte en una de las mejores opciones que existen actualmente.
Higiene dermatológica. Como hemos mencionado, el acné aparece cuando la suciedad y las bacterias se acumulan en los poros haciendo así que aparezcan granitos, espinillas y puntos negros. Este tratamiento consiste en una limpieza profunda para eliminar esa acumulación de impurezas y así hacer desaparecer los puntos negros y las espinillas, liberando los poros para que la piel pueda respirar y estar sana.
Láser. Se emplea para eliminar las marcas del acné una vez que lo hemos curado, no antes. Primero debemos controlar la fase activa del acné para después someternos a él y así lograr que la piel quede libre de cicatrices. Existen varios tipos de láser y todos deben aplicarse a lo largo de varias sesiones. Aunque pueden dejar la piel algo irritada, el resultado final es muy positivo.
Peelings químicos. Este tratamiento resulta muy eficaz para tratar el acné y puede aplicarse de forma más o menos superficial dependiendo del tipo de acné que suframos. Tiene varios efectos que benefician a las pieles con acné: efecto secante, exfoliante y antiinflamatorio. En los casos de acné más leve, este peeling puede ser superficial, tratando únicamente la capa superior de la piel y pudiendo ser aplicado por una esteticista. Para un acné más severo, debe ser realizado por un especialista en medicina estética, ya que se tratará el acné en profundidad. Durante el tratamiento, se pueden aplicar diferentes ácidos, glicólico, kógico, fenol o salicílico entre otros.
Recuerda que para prevenir el acné es muy importante tener una buena higiene, limpiando nuestro rostro dos veces al día, una por la mañana y otra antes de dormir. Además, lo que comemos también influye en el estado de nuestra piel. Una alimentación saludable y equilibrada y una buena hidratación hará que nuestra piel esté más bonita, más luminosa y más suave. El abuso de productos procesados, de azúcares y de lácteos puede aumentar la aparición de granos en la piel, especialmente en pieles propensas a desarrollar acné.
Si estás pensando en realizarte un tratamiento estético para el acné, acude a un centro estético profesional e infórmate sobre cuál es la mejor opción para tu piel y tu tipo de acné.
