Por qué todo el mundo habla del nervio vago

Alias conocidos: nervios vagales, nervio vago.

El nervio vago es el nervio craneal más largo del cuerpo y se extiende desde el tronco encefálico, pasando por el cuello y el tórax, hasta el vientre y el suelo pélvico. Transmite señales del cerebro a los órganos y de los órganos al cerebro.

El nervio vago desempeña un papel fundamental en el sistema nervioso parasimpático (SNP). De hecho, constituye el 75% de sus fibras nerviosas. Este sistema, junto con el sistema nervioso simpático (SNS), forma parte del sistema nervioso autónomo (SNA), que supervisa nuestras funciones inconscientes, como el ritmo cardíaco, la digestión y la excitación sexual.

Está conectado a todos los sistemas del cuerpo y canaliza toda la información sensorial y los receptores de tensión. Así que la respuesta es: mucho.

Sin embargo, para no distraer la atención, nos limitaremos a mencionar algunos aspectos en los que tiene un gran impacto: los niveles de estrés, el intestino y el sexo.

Como este nervio hace tantas cosas, es importante mantenerlo toiiight. O, en un lenguaje más formal, tonificado. He aquí tres formas de estimular y tonificar el nervio vago:

1. Respiración abdominal lenta y controlada

Lenta de verdad: unas seis respiraciones por minuto es lo ideal. Inhala por la nariz hacia el pecho y luego hacia el abdomen antes de exhalar lentamente por la boca.

2. Exposición al frío

Esta es una gran manera de estimular el nervio vago cuando se necesita calmar el ef inmediatamente. Algunas maneras de hacer esto:

• Salpícate la cara con agua fría.
• Aguante la respiración y sumerja la cara en un recipiente con agua fría.
• Colócate una bolsa de hielo sobre los ojos.
• Bebe agua helada.
• Dúchate con agua fría.

3. Cantar, tararear o incluso hacer gárgaras

Dado que el nervio vago está unido a la parte posterior de la garganta, cerca de las cuerdas vocales, pueden ser formas eficaces de estimularlo y tonificarlo.

El nervio vago te ayuda a salir del modo de lucha o huida.

Cuando te encuentras en una situación estresante, tu SNS estimula tu respuesta de lucha o huida. No sabe distinguir entre el estrés de "acabo de enviar un mensaje arriesgado a la persona que me gusta" y el estrés de "mi vida está literalmente en peligro". Simplemente hace saltar las alarmas.

Un poco dramático, pero bueno.

En los viejos tiempos, cuando éramos cavernícolas, había una diferencia muy obvia entre "la amenaza está aquí" y "la amenaza se ha ido", por lo que era muy obvio cuándo debía intervenir el nervio vago para calmarlo todo. Pero hoy en día, con tantos factores estresantes del mundo moderno precipitándose constantemente hacia nosotros, la amenaza percibida persiste. Y podemos permanecer en este modo mucho más tiempo del que nos conviene.

Algunas formas de estimular el nervio vago para que entre en acción, como éstas, pueden ayudar a reducir el estrés y la ansiedad rápidamente.

Dentro del intestino hay un "segundo cerebro", el sistema nervioso entérico (SNE), que controla todos los aspectos de la digestión. El nervio vago es la principal vía de comunicación entre el SNE y el cerebro. Y cuando hay irritación en el sistema gastrointestinal -como en el SII, el estreñimiento o la diarrea-, las investigaciones han demostrado que el SNE envía señales al cerebro que pueden desencadenar cambios en el estado de ánimo.

Esto es importante porque solíamos pensar que los trastornos del estado de ánimo como la ansiedad y la depresión afectaban al intestino, causando trastornos intestinales. Pero en realidad, es probable que sea al revés, y que esas señales vayan del SNE al cerebro a través del nervio vago.

El nervio vago también actúa como una especie de embajador del cerebro, supervisando ciertos reflejos del intestino sin que el cerebro reciba información directa.

Hay cuatro vías nerviosas por las que las mujeres pueden experimentar el orgasmo y, lo has adivinado, el nervio vago es una de ellas. Las investigaciones han demostrado que el nervio vago desempeña un papel importante en los orgasmos vaginales cuando se estimulan el cuello uterino y/o el útero.