5 razones para dejar de hacer chupetones
Aunque son señal de pasión y desenfreno, los chupetones son peligrosos. Aquí tienes los motivos.
Seguro que alguna vez te han dejado en el cuello una de estas muestras de amor y pasión – y seguro que tú lo has dejado en cuellos ajenos – pero... ¿sabías que los chupetones son peligrosos? Aunque parezca mentira, hay muchos motivos por los que deberías de dejar de hacerlo.
1. Esa marca morada es un hematoma: la succión intensa en una zona de la piel provoca un hematoma, es decir, una acumulación de sangre generada por una hemorragia interna. Al succionar, parte de los vasos sanguíneos y los tejidos se rompen y así se produce la marca. Visto así, no suena tan romántico, ¿no?
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2. Pueden provocar herpes oral: si la persona que te lo hace tiene herpes oral, puede trasmitírtelo mediante el chupetón. Otra muestra más de que esta practica no es muy recomendable.
3. No se quitan tan fácil: si lo que tu pareja pretendía era 'marcar terreno', lo ha conseguido. Los chupetones no se quitan tan fácilmente y no hay cura para ellos, aunque poner hielo sobre ellos puede ayudar. Eso sí, mientras más sana estés, antes se te irá la marca. Dato curioso: si los chupetones te salen con demasiada facilidad, probablemente te falte hierro.
4. ¡Pueden dejar cicatriz!: cuando el chupetón es muy profundo, pueden dejar una marca en la piel para siempre.
5. Pueden provocar parálisis: aunque no es lo más habitual, una mujer de Nueva Zelanda vio como su brazo izquierdo se paralizaba debido a un chupetón. La succión había sido tan intensa que el coágulo de sangre le provocó un pequeño infarto que terminó en parálisis.
Como verás, no mentíamos al afirmar que los chupetones no son muy recomendables. Es mucho mejor optar por practicas sexuales más sanas y seguras (¿puede haber algo más sano y placentero que el 'coreorgasmo'?) y, sobre todo, saber aprovechar al máximo el sexo, ¡sin ponernos en peligro!
¿Y tú, ya sabías que los chupetos son peligrosos?
