Lo que está bajo mi control frente a lo que está fuera de mi control
"La naturaleza paradójica del control es que, para tenerlo, hay que renunciar a su necesidad. Todos queremos sentir que controlamos lo que ocurre, pero eso es imposible", afirma Monica Berg, autora y líder del pensamiento espiritual.
"Nos centramos mucho en lo que no podemos controlar. Todo lo que tienes anotado en el calendario o en la agenda te da la ilusión de control", continúa. "¡No me malinterpretes! Me encantan mis rutinas y mi calendario cuidadosamente programado. La estructura y la planificación no sólo me ayudan a pasar el día, sino también a alcanzar mis objetivos.
"El problema no está en la planificación y la organización, sino en cómo respondemos cuando la vida rompe nuestros días cuidadosamente planificados.
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"Dejar a un lado nuestras ilusiones de control nos abre a una mayor alegría y aprecio de cada momento. Cuando no estamos anticipando lo que vendrá después, estamos viviendo plenamente el ahora", afirma Monica.
Sin embargo, para muchos de nosotros es más fácil decirlo que hacerlo.
"Muchos intentan controlar sus vidas creando sistemas, listas, rutinas, horarios rígidos -lo que sea- para imponer un poco de orden y combatir el espectro de lo inesperado", explica Monica. "Cuando nos centramos demasiado en cosas que están fuera de nuestro control, eso significa que estamos entregando nuestra energía a esas cosas en lugar de a lo que podemos controlar".
"Es un poco contraproducente dedicar tanta energía a cosas que están fuera de tu control, y cuando no salen como habías planeado, puedes sentirte impotente o fracasado. Pero, para empezar, se trata de cosas sobre las que nunca has tenido control. Poner el foco aquí puede causar verdaderos estragos en tu estado emocional".
Da estos ejemplos de cosas que están fuera de nuestro control:
● No puedes obligar a la gente a ser alegre, amable, considerada o incluso respetuosa.
No puedes controlar lo que la gente siente por ti, piensa de ti o habla de ti.
No eres responsable de la felicidad o la decepción de los demás. Su vida emocional está fuera de tu control.
● No puedes controlar a tu pareja, hijos, familia, amigos o incluso a tus mascotas.
"Dejar ir debería ser fácil", dice Monica. "No hay trabajo inherente en soltar: es lo contrario del trabajo. Y, sin embargo, ¡es tan difícil!".
Su lista de cosas que hay que dejar ir inmediatamente:
● tomarte las cosas como algo personal
● preocuparte por lo que piensen los demás
● necesitar ser "perfecto"
● intentar ser algo que no eres
● esperar a que llegue el momento adecuado para perseguir tus sueños
"¿Qué tienen en común? Todos son ejemplos de cómo intentamos controlar cosas que por naturaleza están fuera de nuestro control", afirma Monica.
"Rendirse no significa darse por vencido, sino dedicar tu energía a lo que está bajo tu control. Significa reaccionar de forma que apoye tu crecimiento cuando la vida se desarrolla de forma inesperada. Adaptarse de forma positiva a los acontecimientos inesperados de nuestra vida significa ser flexible, mantener el sentido del humor y conservar la certeza de que la vida ocurre PARA nosotros, no A nosotros. Nuestra vida se desarrolla tal y como debería.
"Está en nuestra mano crear nuestras vidas tal y como deseamos que sean. Podemos decidir cómo enmarcamos nuestras experiencias. Podemos decidir cómo nos sentimos y controlamos nuestras respuestas".
