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Por qué todo el mundo está obsesionado con los Reformers de Pilates

Pilates, tan de moda ahora.

"Pilates es cada vez más popular porque funciona muy bien", nos dice Heather Andersen, fundadora de New York Pilates. "Los resultados son extraordinarios".

Añade que se ha producido un gran cambio hacia los ejercicios de bajo impacto. "La gente ha descubierto que puede tener el mejor cuerpo de su vida sin sentir que se está matando. Pilates ofrece entrenamientos específicos que son tan eficaces como divertidos, y la gente se está dando cuenta de que hacer ejercicio no tiene por qué ser algo doloroso."

Y aunque nos encanta una sesión de Pilates sin equipamiento, subirnos a un Reformer puede llevar nuestra práctica al siguiente nivel.

Hacer Pilates en un Reformer tiene muchas ventajas, dice Anderson. "Las correas y los muelles ofrecen resistencia y asistencia, según el entrenamiento, y la posibilidad de mover el carro permite hacer ejercicios excéntricos. Los ejercicios específicos que se realizan en un reformer de Pilates mejoran la coordinación, la flexibilidad y la movilidad.

"Y como hay tantos ejercicios que pueden adaptarse al cuerpo y a la forma física de cada persona, el Pilates es un entrenamiento muy accesible", afirma.

"Además, el movimiento de deslizamiento del carro proporciona más asistencia y comodidad de la que obtendrás con el Pilates en colchoneta". , dice Anderson. "Y, ¡deslizarse hacia adelante y hacia atrás en el reformer es realmente divertido!". (Puedo confirmar que lo es).

"Las clases de Reformer Pilates, como las que se ofrecen en New York Pilates, tienen la ventaja añadida de contar con un instructor que puede ayudar a adaptar el régimen a tu cuerpo y a tu nivel de forma física", dice Anderson. "Los instructores de New York Pilates, en particular, reciben más de 400 horas de formación antes de impartir su primera clase para garantizar que los asistentes tengan la mejor experiencia posible."

¿Listo para probar Reformer Pilates?

En tu primera clase, un instructor te guiará a través de la rutina, preparará el equipo y ajustará la tensión de los muelles para un entrenamiento personalizado, dice Anderson. "Los instructores están ahí para dirigir la clase, pero también para ayudar a las personas, especialmente a los principiantes, así que no tengas miedo de pedirles ayuda. También puedes esperar que al día siguiente te duelan los abdominales, los brazos y el trasero", añade, "tal y como sugiere la clase de Pilates de Nueva York".

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