Cómo dejar de sentir culpa al tomar un día de salud mental para que realmente puedas aprovechar los beneficios
Probablemente hayas oído el término "día de salud mental" en algún momento de tu vida. Ya sea que hayas tomado uno de estos días tú mismo o hayas escuchado a alguien más detallar por qué y cuándo lo necesitaba, se están volviendo cada vez más populares entre muchos miembros de la sociedad. Los días de salud mental se describen como días libres planeados del trabajo, la escuela y/o otras tareas diarias y responsabilidades para que puedas descansar, recargar energías y refrescar tu mente, cuerpo y alma. Puedes sentir la necesidad de tomar uno de estos días si te has estado sintiendo agotado por el trabajo, deprimido o desmotivado, lidiando con mucho estrés o ansiedad adicional en tu vida, o simplemente sientes que necesitas un día alejado para dedicarte a ti mismo.
Un día de salud mental es beneficioso porque brinda un descanso del estrés. Estos días pueden proporcionar una pausa muy necesaria para recargar energías, reducir el estrés y regresar con más energía y una perspectiva fresca. También puede ayudar a prevenir el agotamiento incluso en un trabajo que amas.
No hay vergüenza en admitir que necesitas trabajar en tu salud mental. Muchos de nosotros experimentamos problemas de salud mental a diario, y aunque hay muchas formas de sobrellevarlo, tomar un día de salud mental para simplemente recargar y reorientarte no es algo de lo que debas sentirte culpable. Por supuesto, tomar los pasos correctos antes de salir en tu día de salud mental es ideal. Una manera de conseguir tiempo libre en el trabajo es tomar uno de tus días de enfermedad. En cuanto a otras responsabilidades como mascotas e hijos, pide ayuda a alguien en quien confíes si necesitas que te saquen a pasear a tu perro o un niñero durante tu tiempo planificado.
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Mientras puedes pasar tu día de salud mental acurrucado en la cama descansando, leyendo o viendo tus películas y programas de televisión favoritos, otros pueden optar por salir de casa. Un día de spa lleno de mimos podría ser justo lo que necesitas. Quizás disfrutes estar al aire libre y quieras ir a la playa, hacer una caminata o simplemente dar un paseo. Tal vez quieras involucrar a amigos o familiares en tu día, ya que ser social te ayuda a recargar las pilas.
Recuerda que tu salud mental está vinculada a tu trabajo, vida familiar, salud física y mucho más, razón suficiente para tomar un día sin culpa cuando lo necesites.
Entender los beneficios de tomar un día de salud mental también puede ayudarte a sentirte menos culpable por hacerlo. Hay muchas recompensas al tomar un día libre planeado del trabajo para descansar y rejuvenecerte durante un período difícil o estresante en tu vida. Los días de salud mental son conocidos por prevenir problemas mentales futuros o en aumento, combatir el agotamiento, ayudarte a sentirte menos solo, mejorar tu actitud general, aumentar tu productividad e incluso ayudarte a retomar el rumbo con tu salud física.
Los días de salud mental también pueden ayudarte a lidiar con emociones difíciles o pensamientos complicados, como la culpa que puedes sentir por querer o necesitar tomar el día en primer lugar. Un motivo común por el que muchas personas se niegan a tomar días de salud mental es porque se sienten culpables, avergonzadas, débiles y con un millón de otras emociones abrumadoras. Sus pensamientos les convencen de que están cediendo, haciéndose las víctimas, siendo dramáticas, cuando en realidad es todo lo contrario.
Mientras puede ser difícil admitir que necesitas un día de salud mental, añadir culpa a esos sentimientos no ayuda. En lugar de eso, durante tu día libre planificado, haz todo lo posible para enfocarte en ti mismo y poner en orden tus estados mental, físico y emocional.
